La adquisición de una vivienda es una de las principales preocupaciones de la ciudadanía española, especialmente entre la población más joven.

Con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda, en lo que se refiere al alquiler, el Ejecutivo aprobó el pasado mes de octubre la Ley de la Vivienda, tras el acuerdo alcanzado por los dos partidos que conforman el Gobierno de Coalición, PSOE y Unidas Podemos. Junto a este acuerdo el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también anunció la aprobación de un Bono Joven de Vivienda de 250 euros.

Sin embargo, la situación para la compra de una vivienda es bien diferente a la del alquiler. Entre las ciudades más caras se sitúa Madrid. La capital es, junto con Barcelona, la ciudad en la que el precio de la vivienda resulta más caro, hasta un 20% más que en el resto del territorio nacional, según el informe del Banco de España publicado en agosto.

Ante la posibilidad de comprar una vivienda en Madrid, la consultora 'Activum' realizó un estudio sobre los precios en función del distrito, y del sueldo que se necesita para ello. Estas son las zonas más caras y más baratas.

Retiro, la zona más cara y Ventilla, la más barata

Según los datos ofrecidos por esta consultora, la zona más cara para adquirir una vivienda en Madrid es Retiro. Para comprar un piso en este distrito, es necesario tener unos ingresos superiores a los 240.000 euros. Otras zonas con precios elevados son Gregorio Marañón, Chamartín, Alonso Martínez y Colón, en los que se necesita unos ingresos superiores a los 150.000 euros.

En el otro lado, se sitúa Ventilla como la zona más barata para vivir en la capital, para la que se necesitaría unos ingresos anuales de 44.800 euros. A Ventilla le siguen Parque de las Avenidas, Tetuán, Valdeacederas y Alvarado. En el caso de estas dos últimas, los ingresos anuales deben superar los 50.000 euros.

Dicha consultora realizó este estudio mediante el precio medio de un piso con dos habitaciones y con unas dimensiones de 80 metros cuadrados. En los precios se puede observar una tendencia clara. A medida que nos alejamos de la zona céntrica de la capital, más accesible es el precio de una vivienda.