El arcoiris es uno de los fenómenos ópticos y meteorológicos más impactantes que existen. Está formado hasta por siete colores que siempre aparecen en el mismo orden cada vez que puede observar este fenómeno que tanta expectación y asombro produce en el ser humano.

Así se produce, estos son los colores que lo forman y la razón por la cual no se terminan de diferenciar todos los colores que realmente lo componen.

¿Cómo se produce y qué colores lo forman?

Para que se pueda observar el arcoiris, es necesario que se produzca la reflexión y la refracción de la luz solar en las gotas de agua que se generan con la lluvia. La luz solar, que es de color blanco, se separa formando varios rayos de diferentes colores, que atraviesan las gotas de agua con un ángulo determinado debido a que estas gotas realizan una función de prisma.

Por tanto, para que aparezca un arcoiris en el cielo es imprescindible que entren en juego tanto la luz solar como las gotas de la lluvia. Los colores que componen el arcoiris son siete, que son los siguientes por orden: rojo, naranja, amarillo, verde, cian, azul y violeta.

De los colores que forman el arcoiris, el ojo humano solo puede captar siete de ellos al distinguir solamente siete zonas diferenciadas en la longitud de onda, según un estudio del BBVA Research. en realidad son muchos más las tonalidades que componen este fenómeno. 

¿Cuándo aparece en el cielo y que forma adopta?

Esta banda de colores que se genera con la descomposición de la luz aparece en el cielo siempre que se producen precipitaciones o en días en los que la humedad sea alta. Además, adopta una forma de círculo completo pese a que lo que vemos siempre es un arcoiris con forma de arco.

Con respecto a la forma de arco que adopta, esto se produce debido al ángulo en que las gotas de agua descomponen los rayos de la luz solar blanca, antes de que atraviesen las gotas y adopten diferentes colores. Además, solo es posible ver la mitad del círculo formado debido a que estamos situados sobre la superficie terrestre.