Desde el pasado 1 de octubre, los estadios de fútbol al aire libre pueden volver a llenarse al 100% de su capacidad, aunque los aficionados deben llevar obligatoriamente la mascarilla y tienen prohibido comer, beber o fumar durante los partidos, salvo el consumo de agua. Así lo aprobó por unanimidad el 29 de septiembre el Consejo Interterritorial de Salud y lo ha mantenido este miércoles en una nueva reunión, según recoge La Razón.

“Los eventos deportivos multitudinarios implican aglomeración de un gran número de personas, que pueden proceder de territorios con diferentes situaciones epidemiológicas, y que, por tanto, pueden contribuir a la transmisión de la COVID-19 si no se toman las medidas oportunas. Se celebran en espacios acotados, ya sean establecimientos, recintos, locales o similares, tanto al aire libre como en interiores, que disponen de una organización que permite la aplicación de medidas de control de la trasmisión de virus respiratorios como el SARS-CoV-2″, señala el documento.

Algunas comunidades han flexibilizado estas restricciones

Sin embargo, algunas comunidades sí permiten que sus aficionados consuman dentro del estadio. En este sentido, la Consejería de Salud y Familias andaluza publicó el pasado 7 de octubre una orden en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) que permitía el “consumo de bebidas o alimentos en la zona de público” en “espectáculos públicos o eventos multitudinarios” celebrados en municipios en nivel cero de alerta sanitaria y con una tasa de incidencia acumulada inferior a 50 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Así, se entiende que los futboleros que acudan a estadios situados en estas zonas podrán comer o beber si lo desean.

También Osasuna permite que sus aficionados puedan llevar comida de casa, al menos así lo hizo el pasado viernes 22 de octubre contra el Granada. Además, los bares de El Sadar ya están abiertos, con lo que se podrá comer y beber en estos establecimientos.

En cambio, otras regiones mantienen la prohibición de comer o lo permiten solo en ciertas áreas, como la Comunidad Valenciana: “En los eventos deportivos, salvo consumo de agua, el consumo de alimentos y bebidas se hará exclusivamente en la zona de restauración que se habilite, que habrá de estar separada de la zona del acontecimiento y cumplir con las medidas propias de los establecimientos de hostelería y restauración, siendo asimismo necesario el uso de la mascarilla cuando no se consuma”.

Dado que cada comunidad tiene unas medidas específicas contra la COVID-19, lo más recomendable es consultar las normas de acceso que deben comunicar los clubes antes de los partidos en sus estadios, para asegurarse de lo que está permitido y lo que no.

Se mantienen los aforos

Además de la relacionada con el consumo de alimentos y bebidas, el Consejo Interterritorial de Salud ha mantenido otras medidas para las competiciones deportivas de la Liga Nacional de Fútbol Profesional y la Liga de la Asociación de Clubs de Baloncesto (ACB), así como de otras competiciones y eventos deportivos multitudinarios. Por ejemplo, se mantiene el 100% del aforo en recintos al aire libre y el 80% para espacios cerrados.

Por su parte, los asistentes a los eventos serán preferentemente personas abonadas y público local. Además, se controlará de forma exhaustiva la entrada y salida de los aficionados, fijando franjas horarias, estableciendo sectores independientes o designando un punto de acceso por cada uno de estos sectores, que, a su vez, contarán con zonas de aseo independientes y delimitadas.