El volcán de La Palma entró en erupción el pasado 19 de septiembre y, a pesar del tiempo transcurrido, sigue sin contar con un nombre oficial. Este hecho no es algo extraño, ya que no existe un proceso concreto dedicado a realizar esta tarea en este tipo de situaciones, a diferencia de los que sucede con otros fenómenos naturales como los huracanes.

Y es que no hay definidos unos parámetros concretos que indiquen la manera en la que debe ser bautizado un volcán, aunque es habitual que se utilice el nombre del territorio donde estalla la erupción. Se trata de un proceso que puede demorarse en el tiempo, como sucedió en el caso de la erupción que tuvo lugar en las costas de El Hierro en 2011. Este evento no recibió el nombre al que finalmente quedó unido (Tagoro) hasta cinco años después, tras una propuesta del Instituto Español de Oceanografía (IEO).

En la situación que está teniendo lugar actualmente en La Palma, la erupción viene asociada al Parque Natural de Cumbre Vieja, zona donde explotó la emanación de lava. Por ello, es habitual ver unido al volcán al nombre de este territorio. No obstante, no se trata de un nombre oficial ni definitivo y podría variar en un futuro próximo.

La opción de un nombre guanche

Por el momento han sido varias las propuestas que han surgido para nombrar al volcán de La Palma, la mayoría de ellos asociados al guanche, la lengua que utilizaban los nativos canarios, como recoge el diario digital Nius. Así, uno de los nombres que han salido a la palestra es el de Tajogaite. Esta denominación hace referencia al sitio concreto donde se registró la primera grieta y a una palabra guanche que significa ‘montaña rajada’.

Asimismo, se ha sugerido el nombre Jedey, en homenaje a un personaje ilustre de la historia de La Palma. En concreto, al rey local que luchó contra el conquistador Guillén Peraza en 1447. Esta propuesta fue llevada a cabo por el geólogo y paleontólogo tinerfeño Francisco García-Talavera, quien explicó que este nombre además “coincide con la zona donde ha aflorado el volcán” y mantendría la tradición de emplear el guanche que se ha aplicado en la isla tras los volcanes Tacande, Tehuya, Tigalate y Teneguía.

En cualquier caso, habrá que esperar para saber el nombre definitivo que recibirá el volcán que actualmente se encuentra activo y al que también se han referido algunas voces como Cabeza de Vaca, nombre del punto exacto donde surgió y que ha ido perdiendo fuerza con el paso de los días.