Las personas que sí recibirán la tercera dosis en España
La Agencia Europea del Medicamento aprobó este jueves el uso de una tercera dosis en personas inmunodeprimidas, rechazando de momento su uso en la población general.
La tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus ya es una realidad en España. Tras el anuncio de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) sobre quiénes debían recibir un tercer pinchazo adicional, serán miles de personas las que vayan a recibirla. Por el momento, el organismo europeo descarta que su uso sea para la población general, sino que la reserva para las personas inmunodeprimidas.
Antes de este anuncio, la ministra de Sanidad Carolina Darias ya había adelantado que podría ser así. "Hay una coincidencia con entre la EMA y la Ponencia de Vacunas para empezar con dosis adicionales, pero no refuerzo, en aquellas personas que tengan alguna categoría de inmunodepresión y no alcancen la respuesta inmunológica esperada", dijo ante los medios.
Personas inmunodeprimidas
Ahora el último paso será su aprobación en la Comisión de Salud Pública de la Conferencia Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Algo sobre lo que hay pocas dudas de que finalmente se confirme. Por tanto, ahora la cuestión es determinar exactamente quiénes serán esas personas que reciban la tercera dosis.
El ejemplo de Estados Unidos
En el país norteamericano la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA), organismo equivalente a la EMA europea, aprobó el uso de la tercera dosis de la vacuna en aquellas personas que se hayan sometido a un trasplante de órgano sólido diagnosticadas con afecciones de salud que se consideren tener un nivel de inmunodepresión.
En su caso, la tercera dosis se administra pasados al menos 28 días tras la pauta completa. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos recomienda administrar la tercera dosis a personas que están moderada o gravemente inmunodeprimidos. En estos grupos se incluyen, por ejemplo, quienes han recibido tratamiento oncológico para tumores o cánceres de sangre, los que han recibido un trasplante de órgano y están en tratamiento con inmunosupresores o quieres tienen una infección avanzada o no tratada de VIH. Igualmente, la recomiendan como "medida de precaución" en personas mayores y frágiles, especialmente aquellas que viven en entornos cerrados como residencias de mayores.