Dinamarca deja atrás la COVID y elimina las restricciones
El país nórdico ha anunciado que eliminará todas las restricciones impuestas por el coronavirus para que la enfermedad deje de ser considerada como crítica.
Dinamarca anunció el pasado viernes que a partir del mes que viene será un país sin restricciones contra el coronavirus. Concretamente, será el 10 de septiembre el día que Dinamarca eliminará todas las limitaciones que se establecieron con el objetivo de frenar a la COVID-19, ya que, según el ministro de Salud del país, la enfermedad está “bajo control”.
"La epidemia está bajo control, tenemos tasas récord de vacunación. Por eso, el 10 de septiembre, podremos abandonar las reglas especiales que tuvimos que introducir en la lucha contra la COVID-19", señaló el ministro de Salud de Dinamarca, Magnus Heunicke.
Entrada a las discotecas sin pase sanitario
No es una medida que pille por sorpresa a Europa, pues el 14 de agosto el país eliminó la obligatoriedad de usar la mascarilla en el transporte público, el que hasta el momento era el único lugar donde todavía se exigía. Además, el pase sanitario obligatorio para entrar en las discotecas también desaparecerá el próximo 10 de septiembre.
La eliminación de las restricciones contra el coronavirus estaba prevista en Dinamarca para el 1 de octubre, por lo que esta decisión se ha adelantado unas tres semanas, ya que el país quiere dejar de considerar a la COVID-19 como enfermedad crítica para la sociedad.
A pesar de ello, Heunicke señaló que “no hemos salido de la epidemia” y que el Gobierno danés no dudará en volver a implantar restricciones en el caso de que el coronavirus "amenace importantes funciones de nuestra sociedad".
Vacunación y medidas anteriores
Según datos oficiales, Dinamarca presenta un índice de vacunación bastante avanzado: más del 70% de la población ya tiene la pauta completa de la vacuna contra la COVID-19 y en torno al 75% de sus ciudadanos ha recibido al menos una dosis. Su incidencia acumulada a 14 días por cada 100.000 habitantes es de 232,18, según los datos del pasado viernes 27 de agosto.
Al igual que el resto de países nórdicos, Dinamarca no confinó a su población ni impuso las mascarillas en exteriores, aunque sí aprobó un amplio cierre de la vida económica y social durante la primera y segunda ola del coronavirus. En abril inició una lenta desescalada que recibió un impulso desde junio, cuando fueron eliminadas las mascarillas en interiores salvo en el transporte (bajo ciertos supuestos), apoyada sobre todo en la introducción de un "pasaporte covid".