El pasado 11 de julio, Richard Branson, dueño de la compañía Virgin Galactic, se convirtió en el primer multimillonario en viajar al espacio en un vuelo privado. Un mes después, la compañía ha anunciado que reanuda la venta de billetes para viajar a bordo del SpaceShipTwo, un avión que volará a altitudes de hasta 80 km.

Virgin Galactic afirma que el programa comenzará a partir de 2020 y tendrá un coste de unos 450.000 dólares por billete. La compañía ofrece tres opciones de compra: reserva de un billete único por 450.000 dólares, reservas múltiples para grupos y una opción para hacerse con los 6 asientos de un vuelo a un precio “premium” algo mayor. También se ofertarán billetes para investigaciones en microgravedad y para el entrenamiento profesional de astronautas por 600.000 dólares.

La compañía ofrece una experiencia de una hora que incluye varios minutos por encima de lo que el gobierno estadounidense considera el límite del espacio. Los pasajeros viajarán a una altitud de entre 12 y 15 km a bordo de una nave conectada a un módulo principal. Después, el avión SpaceShipTwo encenderá sus motores y continuará su ascenso en solitario, triplicando la velocidad del sonido y alcanzando una altitud de hasta 80 km, donde los pasajeros podrán sentir la sensación de ingravidez y disfrutar de las vistas de la Tierra.

Cómo comprar los billetes

De momento, los billetes serán ofrecidos a quienes ya se unieron al programa hace meses o incluso años. En total, unas 1.000 personas, las cuales ya habrían dejado una señal de 1.000 dólares, tendrán la opción de comprarlos. Por otro lado, Virgin Galactic ha anunciado que rifará dos billetes entre quienes donen a Space For Humanity, una organización que dice buscar la “democratización” del espacio.

También hay quienes ya compraron sus billetes hace casi una década. En total, más de 600 personas ya están en la lista de espera por haber contratado este servicio cuando costaba entre 200.000 y 250.000 dólares. Una de estas personas es Anna Bru, una española que compró su pasaje hace ya trece años.