Un llamativo fenómeno metereológico afectó a China el pasado fin de semana. Se trata de una enorme tormenta de arena que sufrió especialmente Dunhuang, ciudad de la provincia de Gansu. El suceso tuvo lugar el domingo y dejó imágenes en las que se podía apreciar como esta localidad quedaba engullida por un muro de polvo.

Este fenómeno llegó a superar los 100 metros de altura y causó algunos incidentes en la ciudad que obligaron a intervenir a la policía del país asiático. En concreto, este cuerpo de seguridad se vio forzado a situar controles en las entradas de las autopistas ante los graves problemas de tráfico que provocaba la falta de visibilidad causada por este suceso.

Después de unas horas la tormenta de arena se disipó y Dunhuang comenzó a recuperar la normalidad. Los expertos señalan que es un fenómeno relativamente habitual en esta región del norte del país próxima al desierto del Gobi, como recoge Telecinco.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) explica en su página web que “las tormentas de arena y polvo suelen ocurrir cuando fuertes vientos arrastran grandes cantidades de arena y polvo de suelos desnudos y secos a la atmósfera”.

Al menos 71 muertes por inundaciones

Este fenómeno metereológico ha tenido lugar después de que China se haya visto golpeada por dureza por inundaciones a causa de lluvias torrenciales. Esta situación fue especialmente dramática en la provincia de Henan, situada en el centro del país, donde al menos han fallecido 71 personas. Además, más 376.000 personas tuvieron que ser evacuadas en la capital de la provincia, Zhengzhou.