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Nuevas sospechas sobre la desaparición de las niñas de Tenerife

Los investigadores usarán un láser escáner para comprobar si, como sospechan, Gimeno usó piedras para lastrar el cuerpo de las pequeñas al fondo del mar.

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Nuevas sospechas sobre la desaparición de las niñas de Tenerife
EFE

Continúa la incesante búsqueda de Anna y Olivia, las dos niñas desaparecidas en Tenerife junto a su padre, Tomás Jimeno. Aunque Beatriz Zimmerman, madre de las menores, ha mostrado públicamente su confianza en que el hombre nunca les haría daño, no se puede descartar nada. De hecho, los investigadores sospechan que Gimeno podría haber utilizado piedras para lastrar los cuerpos de las pequeñas al fondo del mar, según informa Telecinco. Para confirmarlo, se están reconstruyendo todos sus movimientos.

Nueva herramienta

La Guardia Civil ha trasladado hasta el puerto de la Marina de Tenerife una nueva herramienta para sumar a la labor de búsqueda. Se trata de un láser escáner, una cámara que gira 360 grados para captar escenarios en tres dimensiones (3D). Su misión grabar el escenario principal de la investigación para comprobar si Tomás Gimeno llevaba a las menores ocultas en los seis grandes bultos que metió en su embarcación.

Durante los tres viajes captados por las cámaras, el hombre transportaba dos equipajes sospechosos por su dimensión, pero no se pudo comprobar el tamaño o volumen, algo que sí podrá determinar esta técnica para saber si las niñas podrían estar dentro. Asimismo, el análisis permitirá examinar la postura de Tomás Gimeno, cómo sería el trayecto del coche a la barca sin peso, con el peso de sus hijas, o con el peso añadido de las piedras si, como suponen los agentes, las usó para lastrarlas.

Búsqueda en el mar

A su vez, el barco Ángeles Alvariño sigue con el barrido del fondo marino, que se alargará hasta la próxima semana, para encontrar alguna pista que acerque al paradero de las menores. El barco utiliza un sonar y un robot submarino para esta tarea, que está resultado muy costosa debido a lo rocosa que está la zona.

El nuevo láser escáner servirá también para que el barco sepa con exactitud las medidas de los objetos y bultos que busca en el fondo del mar, lo que facilitará la interpretación de los biólogos que intentan descifrar los ecos del sónar cuando rebotan en forma de imagen.