POLÍTICA
ERC, sin acuerdo de Govern con Junts: ¿qué opciones tiene de gobernar y cuándo tendría que convocar elecciones?
El candidato de ERC, Pere Aragonès, solicitará el apoyo de JxCat para gobernar en solitario. El plazo para la investidura antes de unas nuevas elecciones se acaba.
El actual jefe en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha expresado este sábado su deseo formar un nuevo Govern con el que liderar en minoría, con el fin de disponer de un Ejecutivo "plenamente operativo", después de 222 días con un Gobierno en funciones.
Más de 80 días han pasado desde el inicio de las negociaciones, infructuosas hasta la fecha, con Junts per Catalunya (JxCat), con el fin de reeditar un gobierno de coalición independentista. Este sábado, el candidato republicano a la presidencia, Pere Aragonès, ha confirmado que pedirá apoyo a JxCat para poder ser investido con el apoyo de los herederos de Convergència aunque sin integrarlos en el Ejecutivo. "Asumimos la responsabilidad de iniciar la legislatura con un Govern en solitario, Cataluña no puede esperar más".
Diferencias insalvables con Junts per Catalunya
Aragonès ha señalado que "solo quedan 18 días para la repetición automática de elecciones y la distancia todavía es demasiado grande. Seguiremos hablando, pero el Govern tiene que ponerse a caminar". Así, las diferencias a día de hoy son insalvables, especialmente en lo que respecta al papel de tutela sobre la Generalitat que Junts exige para el Consell per la República, el órgano que lidera Carles Puigdemont desde Bruselas. A éste le ha afeado que se mantenga "inamovible en la misma posición inicial" cuando faltan menos de tres semanas para que cumpla el plazo para evitar una repetición de elecciones. Dicho plazo concluye el próximo día 26 de mayo. Para la fecha de unos hipotéticos nuevos comicios todavía no se conoce plazo.
El candidato republicano ya ha informado sobre esta decisión al secretario general de JxCat, Jordi Sánchez, quien ya había ofrecido su apoyo a este gobierno en solitario de ERC. No obstante, Aragonès ha dejado la puerta abierta a una posible coalición futura durante la legislatura.
Las diferencias entre ambos partidos son palpables: mientras ERC apuesta por la mesa de diálogo pactada con el Ejecutivo nacional de Pedro Sánchez, en Junts hay desconfianza respecto a esta y apenas le ven recorrido. El primero de los escollos a la intenciones de ERC es que solo disponen de 33 diputados en el Parlament, mientras que para conseguir la mayoría absoluta para ser investido en primera vuelta es de 68.
Para ello necesitarían el apoyo de Junts y de la CUP. En los cálculos de ERC tenían presente la promesa de Jordi Sánchez de votar a Aragonès a pesar de no haber un acuerdo. No obstante, horas después del anuncio diversas voces del partido la ponían en tela de juicio, dando opciones a una repetición de las elecciones en Cataluña.