L452R, E484Q y P681R: las tres mutaciones amenazadoras de la variante india de la Covid-19
El país asiático atraviesa por el peor momento desde el inicio de la emergencia sanitaria. La variante detectada en India empieza a ser prevalente en algunos estados.
La situación en India respecto al coronavirus se ha disparado por completo: el país asiático está atravesando su peor ola de desde el inicio de la pandemia, con más de 300.000 contagios de media diaria y por encima de los 3.000 fallecidos en los últimos días. En estas condiciones, la variante conocida como B.1.617 se está expandiendo por el país y más allá de sus fronteras, con presencia más de 20 países.
Esta nueva variante se detectó en un periodo de tiempo similar a la que consiguió prevalecer en Reino Unido, que posteriormente también ha sido predominante en otros muchos países del entorno europeo. Esta variante británica (cuyo nombre técnico es B.1.1.7), también con una fuerte presencia en India, es un 90% más contagiosa y hasta un 58% más letal. En total, más de 18.300.000 personas han contraído la enfermedad, mientras que la cifra de muertos supera los 204.000.
Una variante con tres mutaciones
En esta variante que ha surgido en India, y que ha llevado al país a tener que incinerar a los fallecidos por COVID en las calles, se dan tres mutaciones dentro de la secuencia de 30.000 letras de ARN que componen su genoma. Un único cambio en dichas letras genéticas puede hacer que el patógeno sea capaz de invadir mejor los órganos del cuerpo y escapar a los encargados de eliminarlo del sistema inmunitario.
Este nombre de las mutaciones tiene que ver con el punto exacto del cambio de letra. De las tres mutaciones que presenta, la que más preocupa es la L452R: esto significa que el virus ha evolucionado cambiando una leucina (L) por una arginina (R) en la posición 452 de su genoma. Es, además, la localización del dominio de unión al receptor, el punto de acceso entre el virus y la célula humana. Esta mutación no es la primera vez que se observa, pues ya se vio en la detectada en California: lo hizo un 20% más infeccioso, con un aumento de la capacidad de replicación y la posibilidad de escapar a algunos anticuerpos generados por los infectados.
Mutaciones E484Q y P618R
La segunda de las mutaciones que tiene esta variante india es la E484K, de la que hasta ahora se desconoce su potencial y sus posibles implicaciones en los contagios y fallecimientos. Finalmente, la P681R, que puede optimizar la entrada del virus en la célula y aumentar la capacidad para invadir tejidos. Así pues, estas tres mutaciones hacen que esté siendo seguida muy de cerca, pues podrían hacerla más contagiosa y virulenta. Según los datos del Gobierno local, esta variante ya es la predominante en el estado de Maharashtra, en pleno centro de país, y está creciendo de forma exponencial en las últimas semanas, desde que se iniciara la segunda ola.
Alerta internacional por la situación
En un país con una población de más de 1.300 millones de personas, uno de los grandes problemas que se encuentran es la secuenciación de variantes: apenas se realiza en el 1% de los casos positivos. Por tanto, hay escaso conocimiento de la prevalencia de una variante u otra. En comparación, Reino Unido, de los que más virus secuencia, analiza alrededor del 10% de los casos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido ya de la peligrosidad de esta variante B.1.617, que podría ser más contagiosa y escapar parcialmente a la efectividad de las vacunas. De momento, se ha calificado como "de interés" y no como "preocupante". En esta última se encuentran las variantes británica, brasileña, sudafricana y californiana, de las que hay pruebas de su mayor transmisibilidad o virulencia.
En total, alrededor de una veintena de países ha secuenciado ya la variante india en su territorio, casi todos casos aislados de viajeros que llegan desde el país asiático. En el caso de España, se investiga un posible caso, que sería en primero. Desde hace unos días, se ha impuesto cuarentena obligatoria para los que lleguen de India.
Eficacia de las vacunas contra la variante
Según un estudio todavía en fase preliminar dirigido por el Instituto Nacional de Virología de la India, la vacuna Covaxin, desarrollada en el país a través de virus desactivados, es capaz de neutralizar esta variante. Asimismo, también lo hace el suero sanguíneo de personas que ya han pasado la COVID.
En cualquier caso, tanto la India como otros países realizarán pruebas para demostrar si estas mutaciones de la variante tienen un impacto real en la infectividad del SARS-CoV-2. Esto se llevará a cabo tanto en experimentos de laboratorio como a través de un seguimiento de la actual ola.