La pesimista predicción de Margarita del Val sobre lo que sucederá en dos semanas
En un encuentro en Onda Vasca, los investigadores Margarita del Val y Daniel López Acuña se han pronunciado en contra de “salvar” la Semana Santa.
Margarita del Val, viróloga del CSIC, ha alertado en un encuentro en Onda Vasca junto a Daniel López Acuña de que el número de muertos va a aumentar en un plazo de dos semanas, debido a que “la movilidad está creciendo peligrosamente por encima de los umbrales recomendables”.
Onda Vasca, en el espacio matinal presentado por Txema Gutiérrez, ha organizado una mesa redonda por videoconferencia con la presencia de dos reputados expertos sobre la pandemia, la viróloga Margarita del Val y el epidemiólogo Daniel López Acuña, donde han tratado diversos temas acerca de la pandemia.
Cuestionados acerca de la Semana Santa, Del Val ha asegurado que “salvar la Semana Santa es salvar a las personas que se morirían en Semana Santa si tenemos un comportamiento insensato”. El objetivo es “salvar a los muertos y no las ganas de vacaciones”. López Acuña apoyaba esta tesis y señalaba que "abrir las compuertas, desescalar, e incrementar la movilidad es un camino pavimentado hacia una cuarta ola" y añadía: “Hay que mantener la contención”.
La vacunación, lastrada por la falta de dosis
La viróloga del CSIC evidenciaba que el “cuello de botella” en la vacunación es “el suministro de dosis” y aplaudía el esfuerzo de los sanitarios de las Comunidades Autónomas para hacer “cosas para las que no estaban preparados”, como ir haciendo un listado de las personas vacunadas en residencias, con el tipo de vacuna administrada o los efectos secundarios simultáneamente a la tarea de la vacunación.
López Acuña lamentaba que la “situación óptima de suministro” no va a llegar “hasta el segundo trimestre” y sostenía que hemos sido “víctimas de las reacciones de las farmacéuticas ante los contratos firmados con la UE, en donde no siempre se ha cumplido con lo prometido, en cuanto a tiempo y número de entregas”, lo que dificulta llegar a la meta del 70% de la población vacunada en verano.
En total, los expertos cifraban que el suministro de dosis está siendo “cuatro veces menos por semana de lo que se esperaba”. López Acuña alertaba de que la vacunación será más “compleja”, ya que hasta ahora se han vacunado a grupos homogéneos y localizados como los mayores en residencias o el personal sanitario, y, a partir de ahora, se vacunará a grupos de personas individuales “que tendrán que confluir en zonas con la logística necesaria”.
Acerca del descenso de la producción, el epidemiólogo encontraba dos razones: “O se vendió una expectativa mayor de la que se podía cumplir o ha habido desvíos de la producción de la vacuna hacia mercados más lucrativos”. En su opinión, lo que se había producido era una combinación de ambos factores.
La llegada de la vacuna de Jansen (Johnson & Johnson) que hasta el momento se suministrará en una sola dosis no convencía a Margarita del Val: “A ellos tampoco les convencen, han lanzado la aprobación con una dosis acelerando los tiempos, pero están preparando los estudios para una segunda”. Del Val recordaba que con la segunda dosis “la cantidad de anticuerpos neutralizantes se multiplica por 50. Hay que ir a dos dosis”.
Pasaporte de vacunación
Preguntados sobre el instrumento que pretende introducir la Unión Europea, López Acuña recordaba la existencia del Certificado Internacional de Vacunación que expide la OMS para asegurar que las personas se administren las vacunas necesarias. Sin embargo alertaba que esto no era “un pasaporte para entrar a un cine o a un partido de fútbol”, lo que podría provocar discriminaciones en la población.
El epidemiólogo explicaba que la UE pretende tener un instrumento “que permita un tránsito más agilizado de personas entre los países de unión para evitar los procesos de cuarentena y PCR previas, que son factores restrictivos”, pero avisaba de que hay que ir “con parsimonia” y no pensar que se trata de un “salvoconducto” con intereses comerciales.
Obligación de la vacuna
Ninguno de los dos investigadores se ha mostrado partidario de hacer obligatoria la vacunación, como pretende la Xunta de Galicia. Del Val invitaba a mirar la caída de mortalidad en las residencias como ejemplo para “convencerse” de la bondad de la vacuna. Además, al no haber obligatoriedad de vacunación para la escolarización en España (salvo en Galicia), podría “entrar en conflicto el derecho a la salud y derecho a la educación”.
Aunque ambos se mostraban dispuestos a cambiar de opinión en una situación límite “Si las cosas llegan a una dinámica epidémica incontrolable y hay reticencias, el instrumento de la obligatoriedad está contemplado en la Ley de Salud Pública para propósitos pandémicos”, manifestaba López Acuña.