A finales de diciembre de 2020, comenzó la campaña de vacunación en diversos territorios del mundo. El primer remedio aprobado fue el elaborado por Pfizer/BioNTech, y eso supuso el pistoletazo de salida a la hora de inocular dosis a los ciudadanos. 

Ahora, y transcurrido poco más de un mes desde aquella fecha, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado que existe luz al final del túnel: ya hay más personas vacunadas contra el coronavirus que contagiadas. Concretamente, 105.992.504 individuos han recibido al menos una dosis.

Vacunación desigual

Pero el organismo ha hecho hincapié en que esto no está ocurriendo de forma igualitaria. Las dos terceras partes de las vacunas se están poniendo únicamente en 10 países, tal y como lamentó Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. Así, 130 naciones cuya población acumulada es de 2.500 millones de personas no han puesto ningún remedio. Por este motivo, la institución ha pedido mayor solidaridad con las naciones menos pudientes. 

En términos absolutos, Estados Unidos es el territorio que más dosis ha administrado (32 millones), seguido de China (24 millones), la Unión Europea (13,5 millones) y Reino Unido (10 millones). En cifras relativas, Israel lidera el ritmo de vacunación, puesto que más de la mitad de su población ha recibido al menos un pinchazo (58%). Tras ellos, se sitúan Emiratos Árabes Unidos (34%), Islas Seychelles (31%) y de nuevo Reino Unido (15%).

La situación en España

En lo que respecta a nuestro país, comienza a acercarse al final de la primera fase de la campaña de vacunación. Según los datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, 1.988.160 personas han recibido la primera dosis de la vacuna, mientras que 682.909 ciudadanos ya están inmunizados contra el virus al haber recibido también la segunda dosis.

Tal y como anunciaron las autoridades sanitarias, el objetivo es que el 70% de la población esté vacunada de cara al verano. El ritmo de inoculación previsiblemente aumentará, ya que en las próximas horas está previsto que lleguen los antídotos de AstraZeneca. Se destinarán a inmunizar a los profesionales sanitarios y sociosanitarios que no están en primera línea y con edades comprendidas entre los 18 y 55 años.