Menos de diez días. Ese es el tiempo que falta para que comience en España la vacunación contra el coronavirus. Lo ha confirmado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, después de que ayer la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, desvelara el pistoletazo de salida de la campaña de vacunación contra la COVID en toda Europa.

Antes de ello, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) deberá aprobar la vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech, un hecho que se espera para el próximo lunes 21. Una vez superado este paso, la Comisión Europea dará luz verde y podrá empezar la vacunación en los países de la Unión Europea.

La logística de la vacuna

Será entonces cuando, desde la localidad belga de Puurs, comiencen a desfilar los vehículos cargados con una de las esperanzas para acabar con la pandemia. Todavía no está claro cuántas dosis le corresponderán a España en esta primera tirada, pero el Gobierno ya trabaja en un plan para su transporte.

Según informa Cadena SER, las vacunas se distribuirán hasta 50 puntos secretos del país y bajo custodia policial para una mayor seguridad. Irán dentro de contenedores con 5.000 dosis a -80°C y con nieve carbonizada para asegurar su correcto mantenimiento. En estas cajas pueden permanecer hasta 10 días sin necesidad de refrigeración adicional. Una vez descongeladas, aguantan otro cinco días adicionales a la temperatura de una nevera convencional.

En estas primeras semanas el criterios a seguir será el del número de ancianos en las residencias, su personal y los sanitarios de cada comunidad. Todos ellos constituyen el primer grupo de vacunación del plan nacional. A medida que haya más dosis, su reparto se equilibrará.

Ultracongeladores, la otra de las claves

En los últimos días, los puntos de almacenamiento de las dosis de Pfizer están terminando de instalar ultracongeladores, necesarios para conservar los viales a una temperatura de -80°C. Así ha ocurrido, por ejemplo, en el Hospital Clínico de Zaragoza, desde donde se distribuirá a todo Aragón, o en el puerto deportivo de Laredo, que hará lo propio en Cantabria.

Los instalados en el Hospital de Zaragoza, de dos metros de alto por uno de ancho, tienen una capacidad de 730 litros, que trasladado a las dosis de la vacuna podría albergar hasta 190.000 viales por cada ultracongelador. Los equipos adquiridos por la comunidad aragonesa tardan unas seis horas en alcanzar la temperatura necesaria para la vacuna de Pfizer. Una vez allí, las vacunas estarán guardadas a buen recaudo y vigiladas por cámaras de seguridad y cerraduras especiales.