En este 2020, aguarda una Navidad atípica, marcada por restricciones similares a las que han protagonizado gran parte del año. Límite de personas en los encuentros con nuestros seres queridos, toque de queda nocturno, cierre perimetral de comunidades o la cancelación de las cabalgatas de Reyes son algunas de las medidas que ha acordado el Gobierno para reducir la movilidad y la interacción social en estas fechas.

Sin duda, los niños serán los grandes perjudicados esta Navidad. Además de quedarse sin ver a Melchor, Gaspar y Baltasar llegar en sus carrozas con los regalos, tampoco podrán disfrutar este año de Cortylandia, uno de los símbolos más tradicionales de la Navidad en Madrid. El centro de entretenimiento ha tenido también que suspender, por primera vez desde 1979, su instalación debido motivos de seguridad, ya que generaba grandes aglomeraciones de gente.

Gran letrero luminoso

Cortylandia acoge, desde hace 42 años uno de los espectáculos más característicos de la Navidad madrileña. Entretenía tanto a los más pequeños como a los adultos con actuaciones llegas de personajes e historias. Sin embargo, este año la asombrosa decoración ha sido sustituida por un enorme letrero luminoso en el que puede leerse “Felices fiestas”. Según fuentes consultadas por Europa Press, la decisión de los responsables es firme y se ha tomado ante la previsión de “no poder controlar el aforo”, ni garantizar la distancia física de seguridad. “Este año será distinto, pero Cortylandia volverá y los madrileños volverán a disfrutar de su música y animación", escribió el pasado mes en Twitter el concejal de Centro, José Fernández.