Este martes 10 de noviembre, el juzgado mercantil número 5 de Barcelona acogerá el juicio entre la empresa alemana Vorwerk, fabricante de Thermomix, y Lidl, de la misma nacionalidad. El creador del famoso robot de cocina demandó a la cadena de supermercados por vulnerar presuntamente su patente al importar y comercializar en España un electrodoméstico similar, el 'Monsieur Cuisine Connect', que ha tenido un gran éxito. Como consecuencia, Vorwerk reclama a la compañía de supermercados una indemnización por daños y perjuicios del 10% sobre el importe bruto de la cifra de ventas de este robot, venido bajo la marca SilverCrest.

Lidl, en cambio, niega firmemente que la comercialización del electrodoméstico haya infringido la patente de Thermomix y pide al juzgado que declare la nulidad de la patente de Vorwerk por “falta de novedad, falta de actividad inventiva y adición de materia”. También manifiesta la improcedencia de la petición de indemnización efectuada por la parte demandante.

Enorme diferencia de precio

La “Monsieur Cuisine Connect” es uno de los productos más exitosos de Lidl. El pasado junio puso a la venta 40.000 unidades que se agotaron en pocas horas. No obstante, la cadena de supermercados sigue la estrategia comercial de venderlo dos o tres veces al año, al igual que otro tipo de electrodomésticos. El hecho de no comercializarlo durante todo el año hace que se produzcan estas compras masivas. Aunque sigue resultado llamativa su rápida venta.

Por otra parte, el éxito de este robot de cocina también se debe a la enorme diferencia de precio con respecto a otros similares. Por ejemplo, a diferencia de la Thermomix de Vorwek, cuyo coste supera los 1.000 euros, la de Lidl salió al mercado por unos 360 euros, un valor casi tres veces menor, y con especificaciones parecidas, aunque tiene menos funciones, accesorios y potencia.

No es el primer juicio para Vorwerk

El juicio que enfrentará este martes a las dos empresas alemanas se llevará a cabo en tres sesiones consecutivas con las intervenciones de los peritos de ambas compañías. Después, el juez determinará si Vorwerk tiene razón, aunque la historia no está de su parte en nuestro país. En 2013 el Tribunal Supremo confirmó la sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona y concluyó que el robot de cocina de la española Taurus no infringía los derechos de la patente de la Thermomix. Además, el fabricante alemán ha interpuesto otros recursos por sus patentes en diversos países.