En plena carrera por encontrar una vacuna contra el coronavirus surge una pregunta: ¿quiénes serán los primeros que reciban esta vacuna una vez se haya comprobado su éxito y se inicie su distribución y comercialización?

Ante este supuesto la OMS ya ha mostrado su inclinación por dar prioridad en el repato de la vacuna a los sanitarios, grupos de riesgo y personas mayores de 65 años, los más vulnerables contra el coronavirus, o bien que las dosis se repartan en función de la población de cada país.

Sin embargo un grupo de expertos en ética y filosofía han publicado un escrito en la revista 'Science' en el que piden que esas primeras vacunas vayan destinadas a los países más desfavorecidos y que, posiblemente, tengan menos recursos para acceder a las vacunas ante las compras que están realizando Estados Unidos, Reino Unido, China, Rusia o la Unión Europea entre otros.

A través de lo que llaman 'Modelo de prioridad justa' los firmantes del escrito aseguran que

"estamos ante una peligrosa carrera por ver quién es el primero en llegar a la meta a la hora de conseguir la vacuna", además de resaltar los peligros de los nacionalismos a la hora de conseguir esta vacuna. "El derecho de las personas a acceder a unos recursos que salvan vidad no debería depender de su nacionalidad"

Por esta razón este colectivo aboga por distribuir estas primeras vacunas con el objetivo de reducir la mortalidad y dárselas primero a colectivos con más riesgo de secuelas o muerte; después para grupos más afectados por la pandemia; y por último al resto de la población, dando prioridad a los países con más infección. Además también proponen que aquellos países que logren frenar sus contagios compartan la vacuna con aquellos en los que el virus esté al alza. Se espera que se empleen entre 7.000 y 14.000 millones de dosis en todo el mundo para garantizar la inmunidad de la población.

En declaraciones a El Periódico, Rafael Vilasanjuan, miembro de la Alianza para la Vacunación (GAVI), se msotró cauto ante la distribución de la vacuna : "La discusión sobre la futura vacuna debe tener en cuenta que el grado de incertidumbre sigue siendo muy grandes. Será difícil establecer prioridades sin saber el tipo de vacuna. ¿Y si la vacuna que sale no se ha probado en mayores de 65? ¿Y si sabemos que tiene un 80% de efectividad en niños y de un 20% en adultos? Habrá vacunas que sean más efectivas en un segmento de la población que en otro. Todos estos factores condicionarán el reparto".

Vilasanjuan también se mostró partidario de que todo el mundo tenga acceso a la vacuna y pide un precio razonable para que todos los países puedan optar a ella. "Es impresicindible garantizar que todos los países tengan acceso a una vacuna. Esto también tiene que ver con el precio al que se venda. Si la dosis vale más de 10 euros, no estaría al alcance de los países de África".