Preocupación añadida a partir de otoño según los médicos de atención primaria. El motivo se debe a que si se produce el temido rebrote tras el verano, éste podría coincidir con la campaña de la gripe: "Este año va a ser brutal", aseguró María Fernández, directora del Centro de Salud Las Cortes de Madrid, en La Razón .

"Cuando aparezca la tos, fiebre… va a haber que hacer PCR a todo el mundo. Ahora tenemos suficientes, pero necesitamos refuerzo de personal, y no llega". Fernández también recalcó dos necesidades muy importantes: "Incorporar profesionales en medicina de Atención Primaria para atender a los pacientes institucionalizados en residencias de mayores y potenciar la atención en domicilio a pacientes crónicos".

Por ello, afirmó que "hay una incertidumbre seria porque no tenemos los refuerzos que habían prometido. No sólo hace falta material o PCR, hay que invertir en personal, no podemos seguir haciendo más por menos".

Vuelta a las consultas

Con el ingreso en la nueva normalidad, los centros de salud están volviendo a recibir pacientes, aunque con una pequeña salvedad: "Una vez superado el momento más grave, hay cierta angustia a querer ser atendido", declaró Salvador Tranche, presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC).

Pero Tranche también se manifiesta en la misma línea que María Fernández: "Hay presión. Funcionamos mejor porque la situación de la pandemia está más controlada, pero estamos debilitados aún. No se ha incorporado ningún recurso a Atención Primaria, salvo un número escaso de rastreadores".

"El punto de partida antes de la pandemia ya era malo, y ahora los profesionales están agotados física y psicológicamente, porque la gravedad de la enfermedad y la dificultad de su gestión en un entorno de altísima incertidumbre, escasez de recursos, protocolos que cambiaban de un día para otro… ha sido tremenda", añadió Tranche.

Seguridad y pruebas conjuntas

Para Fernández, "se debe dar valor a la visita del paciente, seleccionar bien las actividades que se van a realizar y juntar varias en el mismo día. Las visitas son más largas, lo que obliga a que haya menos número de pacientes para evitar que se colapsen las salas. Tenemos que hacerlo con seguridad, por eso el contacto con el Centro de Salud tiene que ser por teléfono, y si es necesario verlos que vayan, que se les va a atender".

Por último, Tranche quiso pedir que los pacientes eviten acudir si no es necesario: "Hay que reducir las visitas innecesarias y fomentar la autorresponsabilidad y el autocuidado. El virus está aquí, el riesgo en los centros de salud o en los centros sanitarios en general es mayor porque es donde se encuentran los enfermos y por eso defiende la atención no presencial".