Los trabajadores cuyo despido sea declarado ilegal y por tanto sean readmitidos en su puesto de trabajo tienen derecho a disfrutar de los días de vacaciones que les correspondían durante el tiempo que duró su cese. Es lo que ha resuelto el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en una sentencia que sienta jurisprudencia en este ámbito en el seno del club comunitario.

Esta instancia, cuya sede se encuentra en Luxemburgo, ha considerado que un despido es algo ajeno a la voluntad del trabajador y un hecho imprevisible, por lo que no procede privarle por esa causa de unas vacaciones a las que habría tenido derecho si no se le hubiera cesado de forma ilegal, sino que, una vez se ordena su readmisión, ese periodo de cese de actividad debe considerarse de trabajo efectivo.

Sentencias previas ya habían dictado que si un trabajador no puede cumplir con sus funciones por causas imprevisibles y ajenas a su voluntad, en caso de caer enfermo, por ejemplo, eso no suspende el derecho a vacaciones anualres retribuidas.

Dudas en Bulgaria e Italia

El TJUE se ha pronunciado en esta materia a raíz de dudas planteadas por la Corte Suprema de Casación italiana, la última instancia judicial del país transalpino, y el Tribunal Supremo de Bulgaria en los casos de dos empleadas que fueron despedidas ilegalmente y posteriormente readmitidas. Ambas reclamaron una indemnización por las vacaciones retribuidas que les habrían correspondido durante el despido y que no habían podido disfrutar.