Uno de los artículos más demandados por los usuarios para la protección individual contra el coronavirus, si no el que más, son las mascarillas. Por eso, se encuentran a cuentagotas tanto en las farmacias como en los supermercados. Existen varios tipos, y no todas sirven para prevenir el contagio de coronavirus: quirúrgicas, filtrantes, caseras y contra gases o vapores.

Quirúrgicas

Se utilizan principalmente para las cirugías y otros procedimientos sanitarios, tales como endoscopias, autopsias o intubaciones. Pueden ser planas o plisadas y se ajustan a la cabeza mediante cintas. Protegen de dentro hacia afuera y son desechables. Sirven principalmente para que un enfermo no contagie y existen dos tipos dentro de esta división:

-Mascarilla quirúrgica desechable: no es un equipo de protección y no protege, pero sí limita la propagación del contagio. Su precio habitual es inferior a un euro.

-Mascarilla higiénica desechable: tampoco es un equipo de protección. Al igual que las quirúrgicas, pueden limitar la expansión del contagio, aunque su eficacia no está testada. También cuestan algo menos de un euro.

Filtrantes

Estas mascarillas filtran el aire que se inhala del exterior. Retienen agentes, partículas o bacterias que provienen del entorno en el que estemos y están certificadas para distintas capacidades de filtrado. Algunas tienen la posibilidad de reducir la humedad del interior mediante una válvula de exhalación y así ofrecer más comodidad a la hora de respirar. Protegen de fuera hacia dentro y son eficaces para prevenir el contagio. Si son reutilizables, llevan la leyenda "R", mientras que si no lo son, pone "NR".

Dentro de este tipo, existe una división en base a la protección de su filtro:

-FFP1 (Filtro de partículas tipo P1): tienen una eficacia de filtración mínima del 78% y un porcentaje de fuga hacia el interior máximo del 22%. Protege principalmente de residuos no tóxicos y no fibrogénicos de polvo o aerosoles, impidiendo su inhalación y los olores molestos. Limita la propagación del contagio y cuestan poco más de un euro.

-FFP2 (Filtro de partículas tipo P2): 92% de eficacia de filtración mínima y 8% de fuga hacia el exterior. Impiden que inhalemos fluidos tóxicos de polvo, aerosoles y humos, principalmente para evitar su baja o moderada toxicidad. Las que no tienen válvula de exhalación protegen y limitan el contagio, al contrario de aquellas que sí tienen. Su precio medio ronda los 3 euros.

-FFP3 (Filtro de partículas tipo P3): 98% de eficacia de filtración mínima, 2% de fuga hacia el exterior. Se utilizan frente a aerosoles de alta toxicidad y es eficaz contra bacterias, virus y esporas de hongos. Protegen pero no limitan la propagación del contagio y cuestan alrededor de 5 euros por unidad.

Mascarillas para gases y vapores

Su utilidad es muy similar a la que ofrece una mascarilla de tipo quirúrgico, aunque son reutilizables. Estos elementos de protección están básicamente destinados para protegerse ante sustancias tóxicas como algunos aerosoles o la pintura, pero no ofrecen garantías ante microorganismos o bacterias, como ocurre en el caso del coronavirus. Todas disponen de válvulas de exhalación y protegen pero no limitan el contagio. Su precio varía en función de los filtros que tengan y las más baratas se pueden encontrar desde los 10 euros.

¿Cuál es la mejor contra la COVID-19?

Las más útiles y eficaces a la hora de prevenir el contagio por coronavirus son las tipo FFP2 y la FFP3. Pero, debido a su altísima demanda, tanto a nivel sanitario como por parte del resto de la población, es muy complicado encontrarlas tras desatarse la crisis sanitaria. Su precio es más alto, pero si se compran reutilizables puede acabar siendo también más rentables para el bolsillo.

Reparto del Gobierno

Debido al cambio de postura por parte del Gobierno (y de la OMS), y como medida excepcional, se están repartiendo 10 millones de mascarillas en todo el país. Aunque Carolina Darias, ministra de Política Territorial y Función Pública, puntualizó que a partir del jueves serán las empresas y los ciudadanos quienes deban encargarse de aprovisionarse de las mismas.