Comenzamos un nuevo año cargado, a buen seguro, de retos y propósitos de enmienda. Y muy probablemente entre las cuestiones a abordar se encuentra la necesidad de hacer un poco de ejercicio, ya sea para perder peso o para mejorar la salud en general. Aunque como siempre, la falta de tiempo y de motivación se presentan como los principales obstáculos que debemos superar.

Vayamos por partes. Si el problema es la falta de tiempo, debes tener en cuenta que existen infinidad de rutinas que pueden completarse sin invertir horas de entrenamiento. En este sentido, los ejercicios compuestos, que incluyen varios movimientos y activan a la vez diferentes grupos musculares ayudan a exprimir cada minuto.

Además, completando entre 30-60 minutos de actividad física al día ya estaremos cumpliendo con las directrices de la Organización Mundial de la Salud, que además considera tan válidas como el ejercicio físico otras actividades que impliquen consumo de energía y que se realicen al trabajar, jugar, desplazarse, como parte de las tareas domésticas o de tipo recreativo.

Si la excusa utilizada es la falta de motivación, el ejercicio físico aporta una serie de beneficios irrenunciables. No en vano, permite reducir el riesgo de sufrir varias enfermedades o reforzar la salud mental, sin olvidar que puede suponer un elemento diferencial en nuestro día a día y que además ayuda a mantener un peso saludable. Es decir, el cuidado de nuestra salud ya debe ser suficiente motivación para abandonar el sedentarismo.

Rutina de fuerza y cardio

Por este motivo, compartimos, cortesía de Rubén García, experto en fitness y entrenador personal, una completa rutina de entrenamiento con la que podemos desarrollar los grupos musculares de tren superior, core y tren inferior sin descuidar nuestra aptitud cardiopulmonar. Además, estaremos en disposición de quemar un buen número de calorías y estaremos más cerca de perder peso o mantenernos en unos parámetros saludables.

Por último, lo ideal es que el ejercicio físico se convierta en la norma y no en la excepción. Para ello, la adherencia y la constancia son fundamentales si pretendemos lograr resultados. Es imprescindible que elijamos aquellas actividades que nos resulten más gratificantes para que se conviertan en parte indispensable de nuestro estilo de vida. Y recuerda, un poco de ejercicio cada día ya es mucho.