Esta primera Navidad que vamos a pasar en pandemia mundial tiene unas recomendaciones claras a la hora de compartir mesa: intentar no enfrentar a los comensales, máximo número de 10 personas, ventilación, que sea una única persona la que ponga la mesa, cubiertos, copas, y la que manipule alimentos. 

Y en estas, Mercadona nos va a facilitar  más la vida con el penúltimo lanzamiento gastronómico que ya puedes adquirir. Se trata de cochinillo asado, para meter al horno y listo. Fácil, sencillo, sabroso, para una media de 4 personas más o menos y sin apenas manipulación a la hora de preparar, sacar o servir. 

Cochinillo nacional: éxito asegurado

La pandemia ha afectado, y mucho, al sector ganadero, y con las medidas y restricciones en muchas localidades, encargar un cochinillo en el pueblo para las fiestas y toda la familia ya no es posible. Por eso que Mercadona haya elegido estas opciones preparadas de producto nacional, es algo que el sector necesitaba. 

El cochinillo asado de Mercadona de Hacendado cuesta 20 € el kilo y en la caja viene un cuarto que pesa en torno al kilo, por lo que el precio se acerca a los 20 euros. Con una caja puede comer una familia de 4 adultos con un buen entrante. 

Modo de preparación del cochinillo asado

• Encender el horno y precalentarlo a 220ºC
• Sacar el cochinillo del envase de plástico en el que viene dentro de la caja
• Colocarlo en la bandeja del horno
• Meterlo durante 30 minutos a 220ºC
• Pasados los 30 minutos, se comprueba que la piel esté crujiente, lo que indicará que está listo.
• Si todavía no está crujiente lo podemos tener unos minutos más.
• En cuanto a los ingredientes, además de cochinillo: aceite de oliva, agua, sal, dextrosa (azúcar), ajo, pimentón y pimienta. 

Miles de cochinillos congelados en marzo

Fuentes ganaderas del sector nos aseguran a Deporte y Vida que en los meses más duros de la pandemia miles de cochinillos y corderos se congelaron, para no desperdiciar las ventas. Y el hecho de que este producto se venda así envasado al vacío, puede significar que hayan sido congelados. El precio se desplomó en marzo, no valían apenas nada en esas fechas, y es una muy buena manera de dar salida a un producto que es muy bueno, que está muy barato, y que si cumple todos los requisitos, estará muy bueno. 

La única pega que se puede poner está en el etiquetado, ya que no aparece la fecha de sacrificio, denominación de origen, la trazabilidad. Solamente "producto nacional".