La crisis del coronavirus que está afectando a España, como al resto de casi todo el mundo, está cambiando nuestros estilos de vida. El hecho de no poder salir de casa salvo en situaciones excepcionales hace que mucha gente opte por realizar pedidos de comida a domicilio. Ante la dificultad que supone a veces encontrar lo que deseamos en los supermercados, hay quien acude a los pedidos de comida a domicilio.

¿Se puede pedir comida a domicilio?

Ante el Estado de Alarma decretado, son pocos los comercios que pueden permanecer abiertos el tiempo que dure el confinamiento. Entre ellos están los supermercados y servicios de comida, entre los que se encuentran aquellas que tienen como parte de sus servicios el reparto a domicilio. También ellos se han visto afectados, pues han tomado sus medidas de seguridad para evitar un incremento de los contagios.

Así, únicamente la cadena de Telepizza se ha pronunciado sobre el protocolo a seguir para la seguridad tanto del repartidor como del cliente. Cero contacto entre ambos, el repartidor deja la bolsa en el suelo, llama al timbre y el cliente se encarga de recoger la comida, previo pago a través de la aplicación o la web.

En cuanto a Just Eat, aseguran aplicando "un protocolo de actuación ante el COVID-19. Colaboramos de cerca con nuestros restaurantes para prestar el mejor servicio a nuestros usuarios, siempre respetando las recomendaciones de salud y seguridad".

El resto de grandes cadenas con servicio a domicilio o bien no ha compartido sus medidas de seguridad o bien han cesado su actividad tanto en locales como a domicilio. Este último es el caso de cadenas como McDonald's, Domino's Pizza o Burger King, que ha aplicado un ERTE a su plantilla.

¿Es seguro pedir comida a domicilio?

La Autoridad Europea para la Salud Sanitaria (EFSA por sus siglas en inglés), ante la confusión creada por el coronavirus, ha emitido un comunicado para tranquilizar a la sociedad. "En la actualidad no hay pruebas de que los alimentos puedan ser una vía de transmisión probable del virus. Las experiencias previas con coronavirus afines indican que no se produjo transmisión a través del consumo de alimentos".

Por tanto podemos concluir que sí es seguro, pero siempre siguiendo un protocolo de seguridad. Igualmente, se recomienda no hacerlo salvo que sea estrictamente necesario, tanto por la salud de los tuyos como del trabajador.