Los proteoglicanos son moléculas que conforman la estructura de las células y que están en nuestra piel de forma natural. Su función es aportar firmeza y elasticidad a la piel. Dos de las acciones más demandadas según vamos cumpliendo años.

Además, destacan por captar hasta 1.000 veces su peso molecular en agua y por activar la producción de colágeno, aumentando la regeneración celular. Uno de los activos más demandados en el mundo de la cosmética y que se ha convertido en objeto de deseo en el mundo de las farmacias.

Los proteoglicanos actúan a nivel de la dermis y se usan para hidratar las pieles secas. Además, han cobrado mucho protagonismo como activos antiedad, sobre todo por sus propiedades reafirmantes. Además, se suelen usar junto a otros activos como la vitamina C o los factores de crecimiento, que potencian aún más sus efectos.

Cómo utilizar los proteoglicanos

La farmacéutica Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia, nos explica todos los secretos de este activo: "normalmente están presentes en ampollas y sérums que se deben aplicar como primer paso del tratamiento, después de la higiene de la piel. Las recomiendo, especialmente, para las pieles secas, aunque también hay fórmulas oil free que pueden usarse en pieles grasas y mixtas. Se pueden utilizar en momentos puntuales, por su efecto flash, o también como una cura de tratamiento durante un periodo determinado".