Los cálculos renales suponen la tercera consulta en Urología más frecuente en España y, aunque su promedio de aparición es más bajo que en el resto de Europa o Estados Unidos, es una patología que necesita más investigación. Para empezar, no se ha establecido una causa única y las medidas de prevención suelen orientarse a la vida sana y a la prevención. Por ello, un informe de la Facultad Medicina de la Universidad de Mahidol (Tailandia) puede haber dado un paso más en la ayuda contra este sufrimiento con una bebida inesperada: el café.

Según la investigación, publicada en 'Advances in Nutrition', la cafeína se ha revelado útil para prevenir la formación de lo que popularmente se llaman piedras en el riñón. Este informe supone una novedad porque hasta ahora se consideraba que al no ser el café una bebida diurética era perjudicial para el filtrado del riñón. Hasta ahora, las indagaciones sobre este compuesto y su relación con los cálculos renales eran contradictorias.

Los investigadores tailandeses recogieron las estadísticas de varias investigaciones llevadas a cabo durante las últimas décadas y descubrieron que la cafeína evitaba que se repitieran los cálculos renales gracias la translocación de una proteína de unión al cristal de los minerales y sales que se depositan en los riñones. En general, los cálculos se forman cuando la orina se concentra, lo que permite que los minerales se cristalicen y se unan, según explica la Clínica Mayo.

Otro descubrimiento importante es que el café descafeinado ayuda a la prevención de piedras en el riñón en porcentaje similar al de la cafeína, aunque los estudios no son suficientes para confirmar diferencias entre ambos. Esto abre la hipótesis de que otros compuestos dentro del café también pueden ejercer efectos protectores similares contra la enfermedad de cálculos renales.