Si la Universidad es reflejo y preparación de lo que será la vida en el exterior de los muros educativos, Londres parece que lo está haciendo muy bien. A partir de septiembre habrá cambios significativos en el menú de la Universidad. Y mucho más.

Porque ante la emergencia climática que se vive en muchos sentidos, han decidido eliminar la carne de vaca de los menús y cafeterías, además de promover los plásticos reutilizables, cobrando hasta 12 céntimos por los que no lo sean. En esa línea de buscar un mundo mejor desde las pequeñas acciones, instalar paneles solares en los edificios es otro gran paso.

Cada gesto tiene una repercusión

Y es que en la Universidad de Londres han notado el interés de los alumnos por cuidar el medio ambiente, por intentar mejorar el planeta, no contarminarlo tanto, y saber qué se puede hacer para evitar que todo se destruya.

Y en el reciclaje hay un gran paso, por supuesto, además de la eliminación de la carne, tal y como afirmaba la ONU en su último informe sobre llevar una dieta saludable y responsable con el medio ambiente.

Este gesto se une a otras universidades que buscan reducir su huella de carbono para el año 2025, y seguir el ejemplo de otros centros universitarios los últimos años que han ido realizando diferentes medidas, como en la Universidad de Sheffield, que abrieron una tienda cero desperdicios, donde se podían comprar especias sin envasar y detergente, entre otras cosas.