Stefani Joanne Angelina Germanotta (Nueva York, 28 de marzo de 1986) ha puesto la guinda a una carrera musical ya de por sí exitosa tras alzarse con el Oscar a la Mejor Canción Original por ‘Shallow’, tema interpretado junto a Bradley Cooper en ‘A star is born’, cinta que ambos protagonizaban también. Lady Gaga ya tiene un Oscar que le ha costado sangre, sudor y lágrimas porque el suyo no ha sido precisamente un camino de rosas.

La industria cinematográfica puede llegar a ser muy cruel y entre bambalinas suceden cosas que no siempre salen a la luz. El fenómeno ‘Me too’ es fruto de casos como el de la cantante neoyorquina, que fue violada con 19 años.

“Después de ser violada con 19 años, cambié para siempre. Me encerré en mi misma y no le dije nada a nadie. Yo misma evitaba el tema. Y siento vergüenza incluso hoy. Siento vergüenza por lo que me pasó. Todavía hay días en los que siento que fue mi culpa. Después de compartir lo que me sucedió con hombres muy poderosos en esta industria, nadie me ayudó”, confesó Lady Gaga, durante su discurso el año pasado como ganadora del premio 'Mujer del Año en Hollywood' concedido por la revista Elle.

Secuelas físicas y mentales

“Me escondí durante mucho tiempo hasta que empecé a sentir dolor físico. Luego tuve que ir al médico porque no sabía lo que me ocurría. Y me diagnosticaron trastorno de estrés postraumático y fibromialgia, que mucha gente no cree que sea real. Pero os diré lo que es: es un ciclón de dolor inducido por el estrés” añadía la cantante, que reconoció haber atravesado una época muy turbulenta de depresión, ansiedad, trastornos de la alimentación y dolor”.

Si bien nadie podrá nunca reparar el daño que sufrió en lo personal, el triunfo de Lady Gaga es al menos un premio a la constancia. "Esto es un trabajo duro. He trabajado duro durante mucho tiempo y no se trata de ganar. De lo que se trata es de no rendirse. Si tienes un sueño, lucha por él", aseguró Lady Gaga tras recibir la estatuilla.