Las rodillas son unas de las articulaciones que más lesiones padecen y que más cuestan recuperar, no sólo por su composición sino por ser gran parte del soporte del cuerpo y llevar una carga extra en cada deporte.

Te vamos a contar cómo proteger la rodilla, cómo realizar ejercicios de estiramiento y cómo conseguir que, incluso haciendo ejercicio cada día y de intensidad, protejas las rodillas.

Cómo proteger la rodilla con estiramientos

-entrenar el tren inferior para reducir la cantidad de fuerza y presión que deben soportar las rodillas es fundamental

-estirar siempre antes de cada ejercicio y, por supuesto, después. Estiramientos sencillos, como estar de pie mientras estiras una pierna, y cambiar a la otra. O hacerlo de manera sentado en el suelo con las dos piernas estiradas, también es útil para fortalecer toda la musculatura que la rodea y los ligamentos que están presentes. También puedes, con la pierna estirada, llevar el talón hacia atrás y la punta del pie hacia arriba. Repetir varias veces y alternas las piernas.

-puedes realizar también media sentadilla contra la pared, llevando los pies ligeramente hacia delante del cuerpo. Dobla la rodilla de apoyo y eleva la contraria. Puedes hacer también sentadillas sin modificar la posición. Recuerda no mover los pies más allá de la rodilla para al agacharte no forzar la articulación.

-realizar giros con las rodillas flexionadas y las manos sobre ellas, sin soltarte en ningún momento para que transmitas ese calor a la articulación es un buen ejercicio.

-si tienes una lesión, debes cuidar y mucho cómo andas después, la cadera contraria, para evitar tendinitis y sobrecargar demasiado. Acudir al fisio a menudo te servirá para reforzarte y proteger la postura sobre todo para no lesionarte en otro lugar.

-el cuádriceps será tu mejor aliado. Fortalece y crea una buena musculatura para proteger y que no caiga tanto peso en ella.

En el vídeo inicial puedes ver cómo el ligamento patelofemoral medial se mueve, una 'telita' pequeña, muy fina, que cuida de la rótula y es clave en la articulación. Seguro que ahora cuando vayas a hacer ejercicio piensas más en tu rodilla.