En lo que respecta a alimentos básicos de consumo diario como es el pan, éste sigue siendo uno de los alimentos preferidos entre los españoles, estableciendo que "cerca de un 82 % de los hogares lo consume de media seis veces por semana en casi todas las comidas" según Joan Riera, director del departamento de alimentación de Kantar WorldPannel.

Un alimento básico en la dieta mediterránea, en las meriendas, en los desayunos, y del que hoy vamos a descubrir cuál es el mejor pan de Madrid en el concurso que ha convocado el Club Matador, un evento único que busca reivindicar el oficio de panadero y un producto que a lo largo de la historia ha sido esencial tanto para la cultura como para la gastronomía españolas.

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El secreto del mejor pan de Madrid

Al premio han sido convocadas todas las panaderías de Madrid con obrador propio, que tenían que presentar sus hogazas de kilo elaboradas solamente con harina de trigo, agua, levadura y sal.

El jurado ha escogido el mejor pan teniendo en cuenta cinco criterios,

-aspecto

-cocción

-miga

-olor

-gusto

‘Crustó’ ha sido el elegido como mejor pan de la ciudad. Para saber más, preguntamos a Manuel Calvo, directo del obrador.

“Lo que hace especial a nuestra hogaza Crustó son los procesos de elaboración, respetando los reposos y los tiempos de fermentación, con fermentaciones muy largas, en torno a las 18 horas”, nos cuenta a Deporte y Vida. “El proceso de este pan es fermentación en bloque durante 6 horas aproximadamente, después formado y fermentación en pieza durante 12 horas”, añade.

“Le damos un tiempo de cocción corto y a alta temperatura para que caramelicen los azúcares naturales de la corteza. El resultado es un pan de miga esponjosa, húmeda y alveolada, con una corteza crujiente y tostada”, relata.

¿A qué sabe el mejor pan de Madrid?

Este pan sabe a cereal, gracias a la harina de trigo molida a la piedra, que mantiene el grano completo; con un toque leve de acidez, seña de identidad de nuestros panes.

Dónde surge la idea

El Mejor pan de Madrid es una iniciativa que está inspirada en el certamen que desde hace 24 años organiza la ciudad de París para elegir la mejor baguette de la ciudad. Además de recibir este importante reconocimiento, los ganadores se convierten en proveedores del Palacio del Elyseo durante un año.