José Ignacio Fernández Iglesias (18 de enero de 1990) se ha ganado por derecho propio el respeto de sus compañeros y el cariño del aficionado del Real Madrid. Su condición de canterano y su rendimiento sobre el terreno de juego le han valido la admiración de quienes le rodean y su determinación para triunfar en el club de su vida ha sido encomiable. Más, si tenemos en cuenta que fue diagnosticado de diabetes tipo 1 cuando solo tenía 12 años y prácticamente iniciaba su andadura en el club blanco.

“En un primer momento me dijeron que se me había acabado el fútbol, que no iba a poder seguir jugando. Afortunadamente, un par de días después de recibir la noticia, mi médico habitual, el doctor Ramírez, que nada había tenido que ver con las primeras recomendaciones, me dijo todo lo contrario, que era obligatorio que siguiera jugando, porque el deporte era muy importante”, ha explicado Nacho en alguna ocasión.

El deporte como terapia

Y así fue. Nacho perseveró, siguió trabajando a conciencia y vio cumplido su sueño de debutar con el primer equipo del Real Madrid el 23 de abril de 2011 frente al Valencia en Mestalla. Hoy, a sus 28 años y con un palmarés envidiable a sus espaldas, el madrileño sigue disfrutando de su pasión y anima a practicar deporte a quienes sufren de diabetes para poder convivir mejor con la enfermedad.

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“A estas alturas afronto la diabetes con normalidad. Y claro que se puede practicar deporte y convivir con la diabetes como demuestra mi caso. Mira a dónde he llegado. Me gustaría animar a todo el mundo, y en especial a los jóvenes, a practicar algún tipo de deporte porque es una de las maneras de llevar mejor la situación”, explica el Nacho, que es también consciente del esfuerzo que requiere.

"No tengo limitaciones"

“Siempre digo tengo que cuidarme tres veces más que cualquier otra persona que no tiene diabetes, pero a mi la enfermedad me ha ayudado mucho a convertirme en alguien más responsable por todo lo que la rodea. Pero yo no tengo limitaciones. Llevo una vida completamente normal y hago de todo. No solo fútbol. Está claro que debes llevar a mano tus aparatos de control, respetar una pautas de alimentación y unas horas de descanso, pero al final se trata de tu salud y el compromiso es máximo”, concluye Nacho.