Si viajas a menudo sabes que lo de hacer una dieta... es realmente complicado. Si además viajas por trabajo, en ocasiones hay compromisos de los que no puedes dejar de formar parte, como las copas, las cenas copiosas, acostarte tarde...

Pero hemos encontrado una manera de hacer dieta y no morir en el intento, y es gracias a los buffet de los hoteles. Sí, no son el enemigo como puede parecer, sino que ahora se han convertido en aliados gracias a las opciones saludables por las que apuestan. Viajamos a Gran Canaria para entrevistar a Estefan Myon, licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, quien nos lleva de ruta de senderismo por los alrededores del Hotel Salobre Golf & Serenity para contarnos  cómo está cambiando todo respecto a la nutrición y las dietas en los viajes de trabajo, incluso en vacaciones.

Si queremos empezar una dieta, pero viajamos mucho, ¿qué es lo que tenemos que hacer?

El reto en este caso es doble, puesto que llevar una alimentación adecuada cuando tenemos que viajar tanto resulta complicado. En mi opinión, debemos ser coherentes con lo que comemos y a qué hora. Evitar atiborrarse cuando tengamos hambre o comer en intervalos de tiempo muy amplios. Evitar comidas pesadas cuando cojamos un avión y, si se puede, traer algo preparado de casa para el trayecto.

¿Son los buffet de los hoteles el enemigo para las dietas?

Son el terror si comemos por los ojos. Por supuesto, cualquiera de nosotros podría caer en la tentación de comer todo lo que ve. Pero los buffet también ofrecen opciones variadas para poder seguir nuestra dieta. Se debe comer en su justa medida y de manera adecuada siguiendo las pautas de nuestra dieta.

¿Cómo podemos comer sano cuando estamos lejos de casa trabajando y el estrés vive con nosotros?

Sobre todo, evitando alimentos procesados y productos que no tengan ningún aporte nutritivo. Debemos hacer un esfuerzo por evitar los restaurantes de comida rápida y buscar comercios o locales que ofrezcan productos de mayor calidad.

¿Las cinco comidas al día también deben hacerse en vacaciones?

¡Por supuesto! Las vacaciones no son una excusa para dejar de lado nuestros hábitos que tanto nos ha costado obtener. También es cierto que las vacaciones también son para disfrutar como quien dice, y es bueno darse algún capricho.

¿Qué debemos desterrar lo primero, los azúcares, las grasas o el alcohol?

Lo primero quitar es el alcohol, porque estamos genéticamente para sentirnos atraídos por las grasas, los azúcares, la sal, lo que nos ha hecho sobrevivir como especie.

Más deporte y mejor alimentación, parece fácil pero no lo es... ¿por qué cuesta tanto?

Tenemos un sentimiento como de huida hacia estas dos palabras. Cuesta hacer actividad física y llevar una buena dieta, la gente suele empezar muy motivada pero al cabo de las semanas suelen dejarlo.

El papel del nutricionista cada vez es más importante, ¿lo habíamos olvidado?

Es importante porque nos hemos olvidado del, por así decirlo, intentarnos guiar por nosotros mismos sin recurrir a un profesional, sin saber que ellos son la clave.

En otoño las legumbres y los platos de cuchara son protagonistas, ¿qué debemos evitar para que sean saludables?

Debemos evitar añadir chorizos o carnes muy grasas.