¿Cuántas copas podemos tomar en verano? ¿Cuáles son las ventajas de los zumos naturales? ¿Cómo organizamos nuestra dieta en verano si no tenemos cocina? Comer de manera equilibrada las semanas de vacaciones es posible, muy recomendable además por la variedad de productos que podemos encontrar en los diferentes mercados. ¿Qué engorda más, el vino o la cerveza? Resolvemos todas las dudas para sacar el máximo partido a las frutas y verduras de temporada.

Entrevistamos para Deporte y Vida a Cristina Bouzas, nutricionista, vocal de Formación del Colegio de Dietistas y Nutricionistas de Castilla y León, quien nos resuelve las dudas del binomio verano y dieta saludable, y nos da las pautas claves para mantener el equilibrio.

¿Cómo podemos preparar una dieta saludable estando de vacaciones?

Hay muchas maneras de seguir una dieta saludable de vacaciones. En verano generalmente tenemos más tiempo libre, y esto nos permite meternos en la cocina a probar algunas cosas nuevas, siempre recordando que un plato o comida saludable se compone la mitad del plato de verduras y hortalizas, un cuarto de carbohidratos complejos, como pan integral, pasta o arroz integrales y el cuarto restante por alimentos ricos en proteínas como carnes (mejor las blancas), pescados azules o blancos, mariscos, huevos o legumbres; acompañado de fruta o yogur como postre. Siempre empleando para cocinar y aliñar aceite de oliva virgen extra.

Así por ejemplo podemos hacer una ensalada de legumbres acompañada de pan integral y fruta, o un gazpacho de primer plato con una paella de marisco hecha con arroz integral y una rodaja de melón.

Tampoco debemos descuidar el desayuno y las pequeñas colaciones entre horas.

Si tenemos cocina es más fácil, pero si cada día estamos en un lugar, ¿cómo lo hacemos?

Cuando estamos de vacaciones y no podemos cocinar a veces parece que seguir una dieta saludable es misión imposible. Por eso la mejor recomendación es pedir siempre uno de los platos (o la mitad del plato si es plato único) de la comida a base de verduras, ya sea ensalada, gazpacho o verdura al horno vigilando siempre los condimentos o salsas que se le puedan añadir, y no dejarnos llevar por los postres dulces. Consumir un día en vacaciones un postre dulce es aceptable, consumir postres cada día no, por eso hay que tratar de cambiarlo por la fruta. Otro truco es llevar siempre a la playa fruta o unos frutos secos al natural sin sal, que aguantan perfectamente el calor y son un snack fantástico.

Si durante el año hemos cuidado nuestra línea, ¿qué 3 consejos debemos tener muy presentes para seguir cuidándonos en verano?

-tener en mente las verduras siempre en la comida y en la cena.

-tomar fruta como postre.

-vigilar los excesos, evitando comidas muy copiosas, los fritos y rebozados y los alimentos muy grasientos. Ya lo dice el dicho castellano “menos es más”.

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Qué engorda más, ¿la cerveza o el vino?

A pesar de que el vino contiene más calorías por cada 100 ml, normalmente suele engordar más la cerveza. Esto es porque una copa de vino suele llevar menos volumen de vino que una caña o un tercio con lo que prácticamente se equiparan en calorías por ración y además lo habitual es tomar dos o tres copas de vino en una comida, mientras que en una tarde podemos tomar 5 cañas perfectamente sin darnos cuenta.

¿Y si hablamos de copas?

Cuanta más graduación alcohólica tenga la bebida alcohólica, más engordará. Si además la acompañamos de refrescos azucarados como colas, tónicas, limonadas, bebidas isotónicas o estimulantes todavía estamos añadiendo más calorías, pero calorías de las que llamamos “vacías”, que son aquellas que no aportan ningún nutriente relevante a la dieta, como es el caso de los dos ingredientes de las copas, las bebidas alcohólicas de alta graduación y los refrescos azucarados. Por esto la recomendación es moderar el consumo de copas.

¿Zumos naturales como opción de desayuno adecuado?

Los zumos pueden parecer una opción relativamente sencilla para consumir fruta, sobre todo si hablamos de niños. No obstante es mucho mejor consumir la fruta completa, a mordiscos. Cuando consumimos un zumo, siempre queda una parte en el exprimidor o la licuadora, además de la piel de la fruta. Cuando comemos una fruta entera, aunque la pelemos, sí estamos consumiendo todas las partes de la fruta. Esto es importante porque en estas partes de la fruta que nos dejamos al hacer el zumo hay fibra, que nos ayuda a ir al baño.

También hay que pensar que, sobre todo para los diabéticos, que un zumo son al menos 3 piezas de fruta concentradas en un vaso. Beber un vaso de 3 naranjas nos lleva unos 3 minutos, sin embargo si comiéramos las 3 naranjas enteras nos llevaría bastante más tiempo, lo que produce más sensación de saciedad y que el azúcar que lleva la fruta se absorba de manera más lenta, pues lo consumimos en más tiempo. Hay que aclarar que el azúcar de la fruta viene con todas las vitaminas, por lo que no podemos llamar calorías vacías a las de la fruta. Hay que desterrar esa creencia de que la fruta engorda o sube mucho el azúcar en sangre. Un zumo si sube el azúcar en sangre de una forma muy rápida, la fruta entera no tanto.

Los productos de temporada siempre son los más sabrosos, ¿qué no debemos perdernos del mercado?

En esta temporada de verano, en cuanto a fruta son buenísimas las sandías y melones, ciruelas, cerezas, albaricoques, nectarinas, paraguayas y melocotones. Al final de agosto también podemos empezar a disfrutar las uvas.

La calabaza, tomate, berenjenas y calabacines son especialmente buenos en esta época estival. Algunas de estas verduras también las podemos encontrar el resto del año, pero es ahora cuando serán más sabrosas. También están las verduras que podemos encontrar todo el año, como la coliflor, las lechugas, zanahorias, puerros, cebollas y ajos.

Si también nos preocupa la ecología y la alimentación sostenible, no solo deberíamos comprar fruta y verdura de temporada, también de proximidad, por lo que recomiendo aprovechar en vacaciones para acercarse al mercado de fruta y verdura o la frutería o verdulería local y probar ¡os llevaréis alguna sorpresa agradable!

¿Qué podemos recomendar a los deportistas?

En el caso de las personas que practican actividad física, es importante que no se salten comidas y que tomen cada día 3 raciones de fruta y 2 de verdura, para asegurar que no haya déficits de vitaminas y minerales. Tampoco deben olvidarse de las legumbres ni del pescado, sobre todo del azul, o de los frutos secos. También necesitan mantener una buena hidratación, por tanto deben beber al menos litro y medio de agua al día, sobre todo ahora en verano y evitar, en la medida de lo posible, las horas de máximo calor.