El verano ya está aquí, con sus cosas buenas y sus cosas malas. Desgraciadamente, es en la época estival cuando más encontramos alergias alimentarias, intolerancias e intoxicaciones, según los especialistas de tuMédico.es, una plataforma que permite pagar solo por la asistencia sanitaria que se necesita a un precio accesible.

El cambio de hábitos que tiene lugar en esta época del año es uno de los grandes culpables de este problema. Durante el verano comemos más fruta y verdura, algo que no solemos hacer durante el resto del año porque estamos acostumbrados, en general, a comer mal. Pueden generar alergias o intolerancias al ser ingeridos o por contacto con la propia piel. Alrededor de un 20 y un 35% de la población sufre efectos derivados de la sensibilidad a distintos alimentos.

Síntomas de alergias alimentarias

Los síntomas son variados, y pueden afectar al aparato digestivo mediante acidez, úlceras en la boca, gastritis, diarrea, estreñimiento, vómitos, a las articulaciones (dolor, rigidez), a la piel (acné, eccemas, sarpullidos, urticarias, picores, inflamaciones) o al bienestar general (fatiga, dolores de cabeza, cambios de ánimo, retención de líquidos). Asimismo, puede que se vea afectado el aparato respiratorio con tos, bronquitis o asma.

Visita a un alergólogo

Pese a que la primavera sea la época distintiva por las alergias, el problema con los alimentos debería llevarnos a visitar a un alergólogo para realizar las pruebas correspondientes mediante un simple test. En el caso de las intolerancias ya existen analíticas exactas como con las alergias.

En verano también son comunes las intoxicaciones por alimentos o bebidas con bacterias, virus, toxinas y parásitos que generan problemas gastrointestinales, como diarreas, fiebres, náuseas o vómitos. El problema es que la temperatura y la humedad favorecen la proliferación de estos microorganismos, especialmente peligrosos en la carne, el huevo y sobre todo, el pescado.

La higiene es importante

Con el objetivo de evitar intoxicaciones, hemos de tener una buena higiene a la hora de manipular los alimentos, cocinarlos y limpiarlos. Otro factor importante es no dejarlos a temperatura ambiente más de dos horas seguidas. Son simplemente algunas de las precauciones que se pueden seguir en casa y con las que se debe ir con cuidado a la hora de comer fuera, especialmente en países exóticos.