7 de cada 10 españoles no puede vivir sin redes sociales en verano. Un dato que refleja la necesidad de comunicar que tenemos, ya sea a amigos, familiares, compañeros de trabajo… o bien de mostrar que estamos haciendo cosas divertidas, alegres, festivas…

Pero, según este estudio, los filtros que usamos en Instagram serían el reflejo de una posible depresión. El estudio lo han realizado dos profesores de las Universidades de Vermont y Harvard tras analizar datos de 43.950 fotos de 166 usuarios, de los cuales 71 habían sufrido depresión.

El filtro de Instagram que indica depresión

Podemos pensar que cada elección de un filtro corresponde a la foto que vayamos a subir, o que parezca más chula sin más. Pero según el estudio, las personas que sufrían depresión aplicaban menos filtros a las fotos, y cuando lo hacían, el filtro elegido era Inkwell, el filtro que pone las fotos en blanco y negro.

Los filtros más utilizados por las personas depresivas

-Inkwell, Crema y Willow.

-Reyes, Stinon y Slumber.

-Sutro, Ashby y Juno.

-Perpetua, Dogpatch y Helena.

Además de este filtro la luz más oscura y los tonos oscuros o azulados eran también un reflejo de una posible depresión.

Los profesores vieron además que no sólo cuando la depresión estaba diagnosticada los filtros cambiaban, sino que mucho antes había parámetros que indicaban que algo iba mal: desde el número de post publicados, los comentarios, el filtro que hemos comentado.

Otro dato más de este estudio es que quien padecía depresión publicaba fotos muy a menudo y, sobre todo, su rostro en primer plano.

En cambio, el filtro más usado por el grupo sin depresión era el filtro Valencia, seguido de X-pro II, Hefe, Rise, Amaro, Lo-Fi, Waldenm, Kelvin, Unknown.