Hemos hablado en ocasiones de la importancia de una buena salud bucodental para evitar lesiones, molestias, incluso problemas de erección en los hombres. Hoy damos un paso más allá, ya que el 90% de la población joven adulta española realiza algún tipo de actividad deportiva y vigilar todos los parámetros del deporte es clave.

Cómo nos afectan las lesiones bucodentales

La gran parte de las lesiones dentales que podremos sufrir durante la práctica del deporte se deben a caídas y colisiones, y la mayor parte de ellas afectan al labio, al maxilar y a los dientes superiores. Por lo tanto, el uso de protectores bucales puede reducir mucho este tipo de lesiones.

Numerosos estudios avalan que los protectores bucales facilitan la postura correcta y alineada de nuestro cuello, mandíbula y cabeza mejorando por tanto el equilibrio. Además, el hábito instintivo de “apretar los dientes” durante la práctica deportiva puede aumentar de forma drástica nuestra fuerza. El famoso ‘bruxismo’ que puede derivar en problemas de dolores de cabeza, cuello rígido, y otras molestias que la fisioterapia deberá resolver.

Gustavo Camañas, miembro de la Comisión Médica de Vitaldent, nos cuenta que los protectores bucales minimizan la incidencia de las lesiones dentales que resultan de la participación en deportes de contacto: fútbol, balonmano, baloncesto, rugby, boxeo…

“Existen varios tipos de protectores bucales, desde los prefabricados o semiadaptados a los hechos a medida, ya que están fabricados por los odontólogos sobre la base de los moldes de la boca del deportista, lo cual permite una adaptación total, protegen en mayor medida y son más cómodos para la práctica deportiva. Además de ser los más efectivos, permiten la respiración a la vez que protegen los dientes y los tejidos blandos”, nos cuenta.

Además, se nos olvida que cuando se practica deporte hay un “excesivo consumo de bebidas isotónicas que, por su alto porcentaje de ácido cítrico, puede dañar el esmalte dental dejando la dentina al descubierto, provocando sensibilidad e incluso favoreciendo el desarrollo de caries, dos complicaciones dentales que también afectarán al rendimiento deportivo”.