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Saniclown, payasos terapéuticos para humanizar los hospitales

Los payasos terapéuticos de la Asociación Saniclown ayudan psicológicamente a los más pequeños a través del humor y la fantasía en los hospitales.

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Saniclown, payasos terapéuticos para humanizar los hospitales
David Hernandez Mejias

Los payasos de Saniclown son profesionales de medicina, arte, educación o psicología, y se han formado en la técnica del “clown”, orientada al abordaje de los pacientes ingresados. Saniclown nació con el fin de mejorar la salud emocional de los pacientes ingresados, así como la de sus familiares y la del personal sanitario.

Se constituyó como asociación sin ánimo de lucro en 2004, y en enero de 2014 fue declarada de Utilidad Pública por el Ministerio del Interior y en marzo de 2015 ha sido declarada, también, de Utilidad Pública Municipal.

Recientemente, la Asociación Saniclown y el Hospital Infanta Leonor firmaron un convenio de colaboración para que todos los miércoles los niños ingresados en el centro recibiesen la visita de Payasos Terapéuticos. El objetivo de la iniciativa es ayudar psicológicamente a los más pequeños a llevar su ingreso mediante técnicas de humor, poéticas y artísticas.

Las visitas a los pacientes se hacen de forma individual, ya que desde Saniclown afirman que “cada paciente requiere una atención y terapia concreta, que puede abordar tanto bajos estados de ánimo como situaciones de ansiedad”, y proponen un ejemplo: “Si un niño presenta una situación de tristeza extrema, construimos para él un mundo de fantasía en el que él se perfila como un héroe y en el que solo proponemos cosas bellas”.

Asimismo, los payasos también se encargan de liberar tensiones tanto a los familiares como a los implicados en el proceso de curación. Su objetivo es reducir el impacto emocional de los tratamientos y de proporcionarles un momento de distracción para minimizar el impacto psicológico que éstos acarrean.

Esta asociación visita también, semanalmente, a los niños ingresados en el Hospital Niño Jesús de Madrid y a los pacientes del Área de Psiquiatría de Adolescentes del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.