Viajar únicamente con equipaje de mano es más cómodo y fácil de transportar y, además, supone un ahorro no sólo en los costes de facturación, sino también si te desplazas en metro o autobús hasta el aeropuerto. Por no hablar que una maleta pequeña entra en cualquier coche y casi siempre está lista para cualquier plan de varios días.

Medidas

Se podría decir que antes las medidas del equipaje de mano eran estándares, pero parece que ahora pueden llegar a variar de una compañía a otra. Antes de empezar a preparar tu equipaje de mano, asegúrate de que éste cumple las medidas y peso reglamentarios. Seguro que has visto en más de una ocasión bolsos enormes que no entran de ninguna manera y a ti te ponen pegas por un par de kilos. Como eso va a seguir pasando, sé el más previsor. Una maleta de viaje pequeña es mucho más sencilla de colocar también en el autobús o el tren, y nunca la perderás de vista.

Organización

Hacer bien una maleta pequeña requiere de organización. Con el espacio limitado es importante ser selectivos, tener muy claro qué necesitamos y guardarlo muy ordenado para que ocupe el menor espacio posible. En estos casos, te ayudará hacerte una lista con lo fundamental.

Aprovecha el espacio

Coloca los elementos que menos ocupen en los huecos de tu maleta. Las gomas de sujeción del interior son muy útiles para fijar la ropa. Además, la mayoría de maletas llevan diferentes bolsillos que debes aprovechar a la hora de hacer el equipaje. Incluso una cazadora como complemento te librará de espacio. O ese jersey de por si acaso que puedes llevar atado a la cintura.

Los ‘por si acaso’

Son enemigos de las maletas pequeñas. Si viajas con niños son fundamentales, habrá más por si acasos que equipaje casi, pero si viajas sólo, en la mayoría de los lugares a los que vayas podrás comprar cualquier cosa en caso de necesidad. Además, necesitar poco te hará ver que tenemos demasiado.

Lo más pesado, puesto

Las botas de montaña, puestas. El vaquero, puesto. El jersey, ya lo hemos dicho, puesto. Así en la maleta irá el resto del equipaje. En lugares fríos con un abrigo es suficiente. Y si vas para una semana o menos, con un jersey y unas botas te organizarás a la perfección. En los aeropuertos y trenes ya sabes que el aire acondicionado funciona de otra manera y parece que te trasladas al polo norte por lo que no desentonarás.

El neceser

Además de las limitaciones del equipaje de mano, es muy importante que cuando organices un neceser para pocos días aproveches las múltiples muestras que puedes obtener, o directamente compres tallas pequeñas. Cada vez más tiendas tienen un espacio especial para viajes con mini tallas que te pueden durar más de una semana.

Toallas y sábanas

El gran dilema. Ahora mismo casi en todas partes hay toallas y sábanas en el destino que elijamos. Y si no hubiera, un saco ligero hará las funciones perfectamente, además de poder dormir donde quieras, y una toalla de microfibra extra ligera no ocupará casi nada. Si vas a la playa, un pareo de tela, donde no se pega la arena, será perfecto. Además de poder decir que ahora te has dado a la vida slow.

Una mochila pequeña

Siempre son una gran ayuda, combinan con todo, en playa, montaña, ciudad, y en los aviones además está permitido que sea como un bolso, por lo que no cuenta para las medidas ni el peso. Aprovecha para meter ahí el cargador, el teléfono, si llevas un libro, un jersey incluso, la cartera, toda la documentación, la guía…