Un San Fermín más en Francia
El Movistar, equipo navarro y en la 42ª participación de la estructura en el Tour, récord, volvió a celebrar un año más San Fermín durante el Tour.
A las 8:00 de la mañana, en Pamplona, un cohete indicaba el inicio del primer encierro de las Fiestas de San Fermín, como cada 7 de julio. A casi 1.000 kilómetros, en el norte de Francia, el Movistar, único equipo español en el Tour y con sede en Navarra, celebraba esta festividad como cada año salvo en 2020, ya que por la pandemia el Tour se disputó en entre agosto y septiembre, fuera de sus clásicas fechas de julio. Todos los integrantes del equipo (corredores, mecánicos, auxiliares, Prensa...) lucieron una camiseta blanca con un pañuelo rojo ataviado al cuello. Algunos suman ya más de 20, como Chente García Acosta, mientras que otros son primerizos. Por vez primera en los últimos años destacó la ausencia de los Unzue en esta fecha, tanto de Eusebio como de su hijo Sebastián.
El gran estandarte navarro del Tour, además del propio Movistar (también en sus anteriores denominaciones como Reynolds, Banesto, Illes Balears y Caisse d’Epargne) es, obviamente, Miguel Indurain, pentacampeón de la carrera (de 1991 a 1995). Sin embargo, y por segunda edición consecutiva, está siendo un Tour sin corredores navarros entre los 176 que tomaron la salida en Florencia. Una racha que se había mantenido anteriormente desde 1985 a 2022. Sin embargo, sí hay numerosos navarros en el Tour, como en el equipo Ineos, con Xabier Zandio e Imanol Erviti como directores deportivos. “En la época de corredor sí se sufría más el no estar en las fiestas, con tus amigos, pero ya con el paso de los años, se lleva mejor”, dice Xabi.
Aranburu, con el maillot español
Por segundo año consecutivo, el campeón de España está en las filas del Movistar, pero además esta vez está en el Tour de Francia. Lazkano, triunfador en 2023, no estuvo en aquel entonces en la ronda francesa mientras que Aranburu, el vigente campeón, sí está en acción: “Es el primer Tour que me veo con buenas piernas desde el inicio. Estoy contento con las sensaciones, con las piernas y con ganas de seguir peleando. Próximamente, vienen buenas oportunidades”. El vasco ya fue 6º y 9º en esta edición.
“No somos expertos en preparar las volatas, pero tenemos buen equipo. Hay días en que gasto muchas fuerzas en colocarme, nos ayudamos mutuamente cuando estamos ahí Lazkano, Gaviria... el objetivo no es otro que ganar”, añade Álex, que tendrá un gran reto nada más acabar el Tour. “Sí, si todo va bien estaré en los Juegos Olímpicos (como adelantó AS). Es un recorrido que me viene muy bien y espero acabar aquí con buenas piernas. Me defino como un corredor rápido en las llegadas que son un poco duras o en las que llega la gente muy castigada”, concluyó Aranburu.
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