Jorgenson: “Ojalá pueda hacer el 90% del trabajo de Kuss”

A sus 25 años, Matteo Jorgenson está completando la mejor temporada de su carrera. Después de cuatro campañas en el Movistar, equipo en el que aterrizó en 2020, el pasado invierno llegó a las filas del equipo que había conquistado las tres grandes vueltas durante la temporada. En este 2024, pocas cosas están saliendo de cara para el Visma, pero una de las notas positivas es la de Jorgenson, y es que el estadounidense conquistó la París-Niza, A Través de Flandes y fue segundo en el Dauphiné tras Roglic… y por un margen mínimo. Al Tour llegó para estar al lado de Vingegaard, y más todavía por la baja de última hora del también estadounidense Sepp Kuss por coronavirus.

Los primeros días de carrera fueron difíciles para Matteo, especialmente tras una caída que le lastró y cedió tiempo en el Galibier, pero en el gravel, camino de Troyes, demostró ser una pieza fundamental para Vingegaard. “Para mí está siendo un año increíble y no tengo palabras para describir todo lo que estoy viviendo. En su momento, llegué al ciclismo con poca confianza (mandó numerosos correos desde Estados Unidos hasta que el Ag2r le respondió años atrás) y ahora tengo mucha, con resultados que jamás imaginaba tener”, cuenta Jorgenson a AS en un perfecto castellano, idioma que ya únicamente usa para hablar con Prensa española y para saludar a su excompañeros del Movistar. Residente en Niza, tiempo atrás reveló en este medio que su sueño era conquistar la París-Niza, y lo cumplió esta temporada. Ahora, tiene más.

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“El equipo intenta convencerme de que puedo hacer generales de grandes vueltas en el futuro, entonces estoy intentando cambiar mis objetivos y mi pensamiento. Si puedo llegar un poco más fino para ello, mejor, pero creo que tampoco tengo que cambiar mucho físicamente”, explica el estadounidense, que se encuentra asombrado con el rendimiento de su compañero Vingegaard después del grave accidente que sufrió el pasado mes de abril en la Itzulia. “Sé que es un increíble corredor, pero, honestamente, cuando sufrió la caída y el tiempo que quedaba para el Tour, no esperaba que llegase así. Es impresionante como trabaja, la concentración que tiene en nuestros entrenamientos, incluso cuando está con su familia. Es una persona de la que tengo que aprender”, dice el norteamericano, que no tiene pensado ir a La Vuelta este año.

El que sí estará por parte del Visma será Kuss, su compatriota, y como líder del equipo de cara a la defensa del título del pasado año. Ausente en este Tour por coronavirus en los días previos, Matteo avisa de un dato: “Este equipo no ha ganado ninguna gran vuelta sin Kuss. Es una baja importante y siempre es un corredor que aporta mucho. Ojalá pueda hacer el 90% del trabajo que hace él”.

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