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TOUR DE FRANCIA | ETAPA 11

Pogacar: “Quiero la revancha”

Por primera vez desde que compite en el Tour de Francia, Pogacar cedió de manera contundente y cae hasta la tercera plaza de la general: “Voy a pelear cada día”.

Col du Granon

De tanto trabajar la tierra, esta terminó dando sus frutos. Eso es lo que hizo el Jumbo con el líder, llevando al límite a Tadej Pogacar durante la undécima etapa, con tres colosos de los Alpes como el Telegraphe, el Galibier y el Col du Granon de por medio. Este último dejó una escena nunca vista hasta el momento: Tadej Pogacar, clavado, sin poder reaccionar, tras el ataque de Jonas Vingegaard a 4,7 km de meta. Le pasaba un corredor tras otro: Thomas, Gaudu, Yates... hasta que el esloveno entró en séptima posición. Exhausto, al llegar a la cima se apoyó sobre su manillar, arropado por su inseparable masajista y amigo, Joseba y el jefe de prensa del UAE, Luke. Una vez recuperó el aliento, pudo hablar ante los medios.

“No sé qué ha pasado. En el Galibier todavía me sentía bien. Tuve muchos ataques del Jumbo, pero respondí. En la última subida no tenía buenas piernas desde el inicio y sufrí. Quizás no fue mi mejor día simplemente. Vamos a ver si lo puedo hacer mejor mañana”, explicó el corredor del UAE tras perder el liderato. Sin embargo, no tira la toalla, ni mucho menos. Mañana, para empezar, tiene una cita importante para iniciar la remontada con la llegada en Alpe d’Huez: “Quiero la revancha y pelear por esta carrera hasta el final. Lo daré todo para no arrepentirme de nada. El Jumbo jugó muy inteligentemente. Van Aert y Laporte se metieron en la escapada. Fue difícil controlarles, no tenemos tantos corredores”. El UAE cuenta con seis integrantes, ya que dos compañeros del esloveno se tuvieron que marchar a casa por coronavirus. Un tercero, Majka, sigue pese a dar positivo, puesto que sus síntomas son leves y la UCI se lo permite.

Pogacar entra en meta cabizbajo y perdiendo el maillot amarillo.
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Pogacar entra en meta cabizbajo y perdiendo el maillot amarillo.THOMAS SAMSONGetty

“Perdí tres minutos... pero mañana a lo mejor los gano. Espero encontrarme mejor. Voy a pelear cada día”, concluía Pogacar, al que la sonrisa que mostró en un descenso en el tramo final de la etapa ante las cámaras se le borró tras el ataque de Jonas Vingegaard. Sin embargo, en meta mantuvo su buen ánimo, una vez recuperado parcialmente del esfuerzo, felicitando al triunfador del día mientras este hacía rodillo. Hasta la pareja de esloveno, la también corredora Urska Zigart, se pronunció. “¡Está bien! Es tan solo una carrera de bicis. Ahora podrá hacer lo que mejor sabe. ¡Atacar!”, decía la ciclista del BikeExchange. Un 13 de julio que quedará como el primero en el que sacaron de punto a Tadej en la montaña (más allá de Vingegaard durante unos instantes en 2021 en el Mont Ventoux)... pero todavía quedan diez etapas. Un mundo.