CICLISMO | LIEJA-BASTOÑA-LIEJA

Evenepoel se hace grande con su primer Monumento en Lieja

El belga, de 22 años, conquista su primer Monumento tras un durísimo ataque a 28 km de meta. Triplete belga con Hermans (2º) y Van Aert (3º). Valverde, séptimo.

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Evenepoel se hace grande con su primer Monumento en Lieja
Agencias

Remco Evenepoel (22 años) se hace grande. No es ni mucho menos su primera victoria, porque ya suma 26, ni seguramente la última, pero sí una de las que marca su trayectoria. El belga del Quick Step consigue su primer Monumento en la Lieja-Bastoña-Lieja, en su debut en la prueba, tras un durísimo ataque a 28 km del final, cerca de terminar la Redoute, una de las cotas decisivas de la carrera. Nadie pudo salir a su rueda y, desde dicho momento, empezó a hacer una contrarreloj en solitario, manteniendo e incluso subiendo las diferencias hasta la meta de Lieja, sin oposición. Al final, todo fue una fiesta belga, porque le acompañaron en el podio Quinten Hermans (Intermaché) y Wout van Aert (Jumbo). Alejandro Valverde, en su última presencia en las Ardenas, su semana preferida, acaba en séptima posición. Fue una caída, a 60 km del final, la que marcó el resto de la prueba.

La montonera, que afectó a cerca de una treintena de corredores, tuvo como gran damnificado a Julian Alaphilippe. El doble campeón del mundo acabó cuneta abajo, teniendo que ser rescatado por su compatriota Romain Bardet. Abandonó. Uno de los favoritos fuera de la ecuación, y otro de ellos ni llegó a tomar la salida: Tadej Pogacar. El esloveno, que defendía título, viajó a su país el miércoles, tras la Flecha Valona por el fallecimiento de su suegra y, aunque estaba previsto, finalmente no volvió a Bélgica. De salida, se formó una escapada de once corredores, con la representación española Pau Miquel, del debutante Kern Pharma. El equipo español, que estará en La Vuelta, dejó su sello tras ser invitado a La Decana de las clásicas (108ª edicion).

Clasficación final

Llegaron a tener más de seis minutos de renta, pero controlados en todo momento por el pelotón. El Bahrain, con un Landa muy activo que se movió en cabeza en varias ocasiones, tensaba la carrera poco después de la caída masiva, aunque respetando a que por detrás llegasen algunos de los afectados, como Alejandro Valverde. El murciano tenía en Enric Mas y Carlos Verona sus grandes escuderos. Para el Quick Step era un cambio de estrategia. De las dos bazas que tenían, Alaphilippe y Evenepoel, la primera se había quedado por el camino, por lo que tenían que optar por la segunda, y mejor imposible. Precisamente en una primavera en la que los de Lefevere no han brillado tanto como en años anteriores, pero que se llevan la última de esta franja del año, una de las más intensas.

Con el salto de Evenepoel en la Redoute empezaron las dudas por detrás. No era un cualquiera, y el reducido grupo de favoritos lo sabían. El belga neutralizó a los últimos integrantes de la fuga que viajaban por delante y, una vez se puso en cabeza de carrera, tenía un gran obstáculo: la Roche aux Fauçons (1,3 km al 10,5%). Si lo superaba, luego hasta Lieja tenía un terreno de rodar, su especialidad. Y lo hizo de gran manera. Por detrás, solo quedaba pelear en las otras dos plazas de podio. Alexander Vlasov lo intentó en solitario, pero no tuvo margen y se decidió en un reducido esprint con un sorprendente Hermans superando a Van Aert. Valverde apenas pudo luchar en la volata, y termina séptimo un día antes de cumplir 42 años. Termina su trayectoria en las Ardenas con 19 podios: tres en la Amstel, nueve en la Flecha (cinco victorias) y siete en la Lieja (con cuatro triunfos).

La caída que marcó la carrera

Cuando llegaron ya estaba celebrando Evenepoel, emocionado. Un deportista que dejó el fútbol a los 17 años y disputó su primera temporada como profesional a los 19, en el Quick Step, un equipo que le tiene 'blindado' hasta 2026. Confían mucho en él, y en 2020 sufrió una dura caída en el Giro de Lombardia que desde entonces, al igual que este triunfo, marcó su carrera, especialmente en los descensos. Poco a poco sigue subiendo peldaños y, aunque por el momento parece que las vueltas de tres semanas están lejos (abandonó en el Giro de 2021), en citas como en Lieja es uno de los favoritos por sus cualidades. Asombró en 2019 con su éxito en la Clásica de San Sebastián, y tres años después logra un éxito que le catapulta. La primavera ciclista de clásicas se acaba, la última para Valverde. Cuando se retire, siempre repasará esta semana de abril con cariño. Fue el gran dominador. Ahora, es el turno de otros, pero el legado ahí queda.