El ciclismo femenino sigue dando pasos de gigante a la hora de poder conciliar la competición con la vida familiar y, este miércoles, la ciclista británica Lizzie Deignan y el equipo Trek-Segafredo han dado buena prueba de ello.

Deignan, campeona del mundo en 2015 y de la París-Roubaix el año pasado, y que ya paró en 2019 por el nacimiento de su hija Orla, ha anunciado este miércoles que no competirá en la temporada 2022 ya que espera su segundo hijo junto al exciclista Philip Deignan para el próximo mes de septiembre y prefiere centrarse por completo en el proceso de embarazo.

En declaraciones recogidas por el equipo Trek-Segafredo Deignan manifestaba sus sensaciones tras el anuncio. "Tener un bebé es una gran decisión, pero no ha sido difícil para nosotros. Queremos tener una gran familia y creo que es el momento de tener otro hijo. Orla ya está lista para tener un hermanito y siento que también estoy preparada para dar el paso y tener otro bebé. El tener un equipo asentado y un lugar fijo donde vivimos también nos ha ayudado. Agrandar nuestra familia es una decisión emocional pero lógica".

Tras conocerse la noticia, el apoyo del Trek-Segafredo a Deignan ha sido rotundo y el propio equipo ha mostrado su compromiso con la corredora confirmando que no correrá en 2022 para centrarse en su embarazo a la vez que han anunciado que Deignan seguirá vinculada al equipo para las temporadas 2023 y 2024. De hecho, el equipo ya firmó a Deignan en 2018 cundo estaba embarazada de su primera hija y, al igual que ahora, también le dieron todo su apoyo. "Ha sido una experiencia muy emotiva. Cuando hablé con el Trek y les comenté mi embarazo, me dieron todo su apoyo. Se lo dije también a Ina, mi directora deportiva fue '¡Es jodidamente fantástico, enhorabuena!' Significa mucho para mí tener este apoyo. Soy una deportista profesional de un gran equipo ciclista, pero el apoyo ha sido muy cercano y estoy increíblemente agradecida".