La etapa reina de esta Volta a la Comunitat Valenciana, con desenlace inédito en las Antenas del Maigmó, tenía de todo: dureza, con hasta seis puertos, descensos técnicos... y un espectacular tramo de sterrato en la parte final en el que mostró su fortaleza el mejor de día, Alexander Vlasov, que en dicho parte cimentó su victoria, que le dio además un premio doble: etapa y liderato. Esta parte de tierra, ideal para amantes de las bicicletas de gravel, también sacó a relucir las debilidades del hasta ahora dominador de la carrera, Remco Evenepoel. El belga, que en el kilómetro final se quedó casi parado, entró a cuarenta segundos del ruso. Carlos Rodríguez, segundo, y Enric Mas, tercero, acabaron con buenas sensaciones.

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Antes de la salida de Alicante, el BikeExchange anunció su retirada de la carrera tras detectar dos positivos en su equipo. El día anterior, el Movistar también tuvo la misma cantidad (Hollmann y Rubio), pero siguió en carrera. En las carreras de menos de siete días (la de Valencia dura cinco), no es obligatorio que los corredores pasen controles durante todas las jornadas, y en este caso la retirada del equipo australiano fue por decisión personal, sin estar obligado a ello. Poco después de comenzar se formó una escapada de once corredores, con dos españoles entre ellos: Fernando Barceló (Caja Rural) y Dani Navarro (Burgos BH). Este año, las invitaciones a la Vuelta están más caras que nunca, y todos los equipos españoles que optan a ellas están luchando al máximo desde el inicio.

Sin embargo, en la fuga era un corredor el que se mostraba más fuerte que el resto: Jan Tratnik. El del Bahrain, campeón de Eslovenia de contrarreloj (compartiendo país con Pogacar y Roglic), era el más generoso en los esfuerzos y el que mejores piernas llevaba. Llegó a soñar con el triunfo de etapa, teniendo una renta de dos minutos a quince kilómetros del final, pero todavía faltaba el duro final: 9,9 km al 7,5%, con el sterrato incluido. No pudo aguantar el empuje de los favoritos a la general en un tramo final que fue el mismo por el que se rodó en la Vuelta el pasado 20 de agosto en la jornada que acaba en el Balcón de Alicante. Esta vez, la organización de la ronda valenciana escogió un desvío que mandaba directamente a los corredores por la tierra, espectáculo puro, y numerosas intentonas: Alejandro Valverde (que pinchó una rueda y siguió), Juan Ayuso... pero el movimiento más fructífero fue el de Vlasov.

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El ruso, fichado esta temporada por el Bora procedente del Astana impuso su ritmo en la tierra, con un gran desarrollo, y volvió a la carretera con una renta que después hizo todavía más grande. Mientras, Evenepoel languidecía, dejando otra vez dudas de cara a objetivos mayores. Por detrás del ruso salió un gran Carlos Rodríguez, que sin hacer tanto ruido, y tras ser tercero el primer día, sigue mostrando unas grandes piernas. Tiene 21 años. Enric Mas, Pello Bilbao y Valverde completaron el top cinco. Quedando dos etapas propicias para velocistas, será complicado desbancar a Vlasov en condiciones normales del maillot amarillo... pero todo puede pasar hasta la meta de Valencia. Un buen espectáculo con aroma de clásica.