Bardet: "Necesitaba nuevos retos y aire fresco"

Romain Bardet, ganador este sábado en Villuercas, es un corredor nuevo. Lejos queda aquel ciclista que fue dos veces podio en el Tour (2º en 2016 y 3º en 2017) y que se pasó nueve temporadas en el Ag2r. De hecho, hacía tiempo que no era el mismo ya que desde 2018 no había conquistado ningún triunfo. “Estoy muy agradecido a todo lo que me dio el Ag2r, tengo muchos amigos allí, y no fue culpa suya que yo necesitara un cambio, nuevos retos y aire fresco”, apunta ahora a sus 30 años y en las filas del DSM alemán (tercer triunfo en La Vuelta tras los dos de Storer). Desde que cambió de maillot, ganó en la Vuelta a Burgos y ahora en la grande española, en la que también es el nuevo líder de la montaña.

Quizá lo que le ha liberado era la tremenda responsabilidad que conlleva ser el líder francés de una formación de su país y que estuviera obligado a aspirar al Tour. Este año ni lo corrió tras ocho participaciones consecutivas. “Era el momento de cambiar de calendario. Necesitaba correr una Vuelta sin tener que pelear por la general, sino luchar sólo por etapas. También trabajar para compañeros, como he hecho para Dainese en los esprints”, cuenta.

Su triunfo fue el segundo consecutivo de un francés en La Vuelta tras el de Sénéchal el viernes. De donde aún no hay ganadores de etapa es de España, que tuvo a Dani Navarro (Burgos BH) y a Jesús Herrada (Cofidis) como los más activos en la escapada. Al asturiano de 38 años le faltó suerte. “Me quedé sin frenos y me caí. Qué rabia porque tenía buenas piernas y no todos los día se está con esa forma”, explicó tras irse al suelo cuando marchaba en cabeza de carrera. Herrada, que entró segundo en Villuercas, también se quedó con sabor agridulce: “Estoy contento por cómo he estado, pero con la pena de no haber podido rematar”.