El futuro por separado de los Izagirre para 2022: "Es posible"
Desde 2011, los hermanos únicamente no coincidieron en el mismo equipo en 2017. Ion está en negociaciones con el Astana para seguir. Gorka, con más dudas.
En la última década, lo habitual dentro del pelotón es ver a los Izagirre con el mismo maillot dentro del pelotón. Gorka, el mayor de ellos (cumple 34 en octubre), y Ion (32) están cumpliendo su tercera temporada en el Astana kazajo. Desde 2011, solo en 2017 no compartieron equipo. En nueve de las últimas diez temporadas estuvieron juntos: del 2011 al 2013 en el Euskaltel, de 2014 a 2016 en el Movistar, mientras que en 2017 Ion se marchó al Bahrain y Gorka se quedó en el Movistar... para ir posteriormente, en 2018, al Bahrain. En 2019 se fueron ambos al Astana, y hasta esta temporada. Para 2022, ninguno de los dos tiene contrato con ningún equipo, aunque ofertas no les van a faltar.
"Estamos negociando continuar. Todavía seguimos en conversaciones y no hay nada cerrado", cuenta Ion a AS, y es que es el hermano que cuenta con más opciones de seguir en la estructura kazaja, a la que vuelve Vinokurov como director deportivo en la siguiente campaña. Su hermano Gorka apunta cada vez con más fuerza a un cambio de aires. "Puede ser que toque separar nuestros caminos para la próxima temporada, pero todavía hay que ver", añade Ion. El menor de los hermanos suma quince victorias en su carrera, y además está en el selecto grupo de triunfador en las tres grandes: Tour, Giro y Vuelta. Gorka suma nueve en total, entre las que sobresale una etapa en el Giro de 2017. Un posible retorno al Movistar, entre el abanico de sus opciones para la siguiente campaña.
Ion, que viene de hacer el Tour y los Juegos Olímpicos, nota que "las piernas ya pesan" tras una temporada muy cargada. "El objetivo es optar a una victoria de etapa (el año pasado lo consiguió en Formigal) y ayudar a Vlasov de cara a la general y a Aranburu en los finales de etapa que mejor se le adapten", detalla sobre los planes del equipo. "La fatiga se nota, tanto mental como físicamente, pero ya recargué un poco las pilas tras Tokio", añadió. Y es que esta Vuelta 2021 dista mucho de la de 2020, en otoño. "La prefiero en las fechas del año pasado, la verdad, porque a mí no me va mucho el calor", destacó. El calor, como es normal en agosto, se deja notar en la última grande de la temporada.