TOUR DE FRANCIA | ETAPA 13
A vueltas con la seguridad
La UCI y ASO extendieron la distancia final de seguridad. Esa zona, establecida dentro de los últimos tres kilómetros, pasó en Carcasona a 4,5 km.
Después de las numerosas quejas del pelotón acerca de la falta de seguridad en las etapas de Bretaña, en la primera semana de Tour, la Unión Ciclista Internacional (UCI) y ASO, empresa organizadora de la ronda, cedieron ante una de las medidas que propusieron los ciclistas en los primeros días: extender la distancia final de seguridad. Así, esa zona, establecida por el artículo 2.6.027 del Reglamento de la UCI dentro de los últimos tres kilómetros, pasó en Carcasona a 4,5 km. “Se realizará una prueba sobre una posible evolución de la normativa, aunque sólo se efectuará con la 13ª etapa”, afirmó la UCI en su comunicado matinal.
Los corredores, a través de su Asociación (ACP), reclamaron que varias metas colocaran su límite a ocho km para que desde ahí se computara el mismo tiempo para todos. Tim Declercq fue uno de los más combativos: “Se puede perder un Tour por una avería o una montonera en un trazado peligroso”. El propio Declercq, Bouhanni, Majka, Poels, Kragh Andersen, Küng, Thomas, Hamilton, Simon Yates o Kluge se vieron involucrados en una dura caída a poco más de 60 km de la llegada. Algunos incluso debieron ser rescatados de una ladera. Kluge, Hamilton y Yates abandonaron por los golpes recibidos. “Hay que revisar y señalizar mejor todos los recorridos”, censuró Declercq en Carcasona. Un problema perenne.