Chris Froome ya conoce la hoja de ruta de su primera temporada en el Israel-Start Up Nation. El británico, tras decidir que no formará parte de la concentración que llevará a cabo su equipo en Girona para continuar con su preparación física y rehabilitación en California, tiene fijado calendario para un curso 2021 con un objetivo tan claro como desafiante: volver a competir con garantías en el Tour de Francia.

Así lo ha desvelado Rik Verbrugghe, director deportivo del Israel, en una entrevista para el medio belga Het Nieuwsblad: "A finales de febrero estará en la Volta ao Algarve. Luego seguirá con Volta a Catalunya hasta encaminarse al Tour a través del Critérium du Dauphiné. Esas son las líneas generales que ahora están establecidas". De cumplirse los planes, Froomey regresaría a una Grande Boucle en la que estuvo ausente en las dos últimas ediciones: en 2019 por su accidente sufrido en Dauphiné (prueba a la que regresará este año) y en 2020 por decisión del equipo, debido a su evidente falta de competitividad en carreras previas como el UAE Tour.

¿Pero será capaz de recuperar su mejor nivel? Esa es la gran duda que persigue al británico en los últimos tiempos, que a sus 35 años sigue decidido a perseguir el sueño de su quinto Tour a pesar de concluir en 98º posición la pasada Vuelta a España, su última cita vistiendo los colores del conjunto Ineos. A la cuestión planteada, Verbrugghe afirma que el mayor problema de Froome no es su condición física sino la dura competencia a la que tiene que hacer frente actualmente en el pelotón: "Desde marzo, Chris se ha vuelto mucho más fuerte y puede volver a desarrollar tanta fuerza en la pierna derecha como en la izquierda. Ahora hay muchos jóvenes que están llamando a la puerta con mucha fuerza. Lo difícil será vencer a jóvenes lobos como Tadej Pogačar, Egan Bernal y pronto Remco Evenepoel". La primera toma de contacto para Froome será en la Vuelta a San Juan (24-31 de enero), donde empezaremos a desvelar incógnitas...