Madrazo, exultante: "El equipo me decía que guardara... pero me puse cabezón y gané"
Ángel Madrazo sorprendió a sus compañeros de escapada llevándose la victoria en el Javalambre. El español no pudo contener las lágrimas.
Ángel Madrazo (31 años) está siendo uno de los protagonistas de la primera semana de la Vuelta. El español se metió en su tercera fuga con la intención de consolidar su liderato en la montaña, y acabó encontrándose con la victoria más importante de su carrera, la primera que logra en una grande. "No me lo creo. Estoy en una nube. La culpa de todo la tiene el maillot que llevo (de la montaña). La estrategia era filtrarme con un compañero en la escapada con la intencion de pasar los dos puertos iniciales en primer lugar. Luego sería mi compañero el que tendría que irse", destaca exultante en una risueña y animada rueda de prensa
"A 70 km de meta, la diferencia era de 10 minutos. Bajé al coche y le dije a Julio (el mánager), no dejemos para mañana lo que podemos hacer hoy. A falta de 50 me sacaron de punto y luego volví a entrar gracias a Bol, que aflojó. El equipo me decía ya que guardara para mañana, pero me puse cabezón y gané. Iniciamos el puerto con buena renta pero a mi subir a ritmo me mata, prefiero cambios de ritmo. Llegué en el tramo final y arranqué. Vi que se quedaban y dije no puede ser. Tendré que mirar los próximos dias en ProcylingStats para ver que esto es verdad", decía entre risas.
"Es el año que más feliz estoy. Funciono mucho con la cabeza, y constantemente me dicen que mi hijo me está viendo por la televisión (tiene dos, uno nacido el pasado mes de julio y otro de cuatro años y medio) y es una motivación. Nunca hay que rendirse. Ahora a ver si hago presión con mi hijo mayor para que mi mujer nos compre la PlayStation4, porque no hay manera". Madrazo lleva "acumulando fugas desde la Vuelta a Burgos. De hecho, ayer no me escapé y vi a gente por primera vez que ni sabia que había venido a la Vuelta".
Además, hubo un momento en el que el coche del Burgos BH, con dos de los tres integrantes de la escapada, tuvo un pequeño error que perjudicó al propio Madrazo y a Herrada. "Pero tira al otro, a mi no", explicaba luego el flamante vencedor entre risas. Por suerte solo fue un pequeño susto. Lo que ha pasado hoy es la hostia. Estamos en todas las fugas, nos dejamos ver, y las grandes vueltas necesitan equipos como el Burgos BH. Ahora, intentaré pelear por mantener este maillot de la montaña hasta Madrid pero soy consciente de que aquí hay grandes escaladores", concluyó el primer conquistador de Javalambre.