Van Aert tuvo que pasar por el quirófano de nuevo tras su caída
Wout Van Aert fue sometido a una nueva intervención para solventar los problemas derivados de la primera, que se produjo horas después de caerse en el Tour.
Las malas noticias no abandonan a Wout van Aert. El belga, que se estrenó este año en el Tour de Francia, tuvo que abandonar la ronda gala en la 13ª etapa. Durante la contrarreloj que se disputaba ese día, el ciclista del Jumbo Visma se enganchó con una valla y se produjo un profundo corte a la altura de la cadera. La lesión fue complicada y tuvo que ser intervenido de urgencia, ese mismo día, en un hospital de Pau. Todo iba bien, según su equipo y los doctores, pero no se atrevieron a dar plazos de recuperación.
Tras esa caída, Van Aert habló en Sporza y aseguró que no todo fue bien. "Al principio no tenía miedo, pero cuando Toon Claes (el cirujano que le está tratando en Bélgica) me dijo que no me habían operado correctamente en Francia, entonces tuve miedo. No fue un accidente dramático, pero el tratamiento en Pau dejó mucho que desear. Podría haber sido peor si no hubiéramos sido rápidos", reveló el ciclista
Ahora, tras esa segunda operación Van Aert comienza un largo proceso de recuperación, para el que no se pone plazos. Actualmente puede ponerse en pie y dar unos pocos pasos con ayuda de unas muletas. "Estaré mucho tiempo sin pedalear y eso me hará perder todo. Aunque con el tiempo podré recuperar toda la fuerza en mi pierna derecha, eso es lo importante. Si trabajo duro, regresaré a mi mejor nivel", añadió.