Pinot: "Prometo atacar, no hay otra alternativa para remontar"

¿Cómo se encuentra a nivel físico en este Tour?

Me siento al mismo nivel que el año pasado durante la Vuelta (acabó sexto y logró dos etapas) o el Giro de Lombardía (en Como se apuntó su primer monumento). Pienso que se trata de mi mejor rendimiento. He mostrado que puedo estar con los mejores corredores del mundo con las mismas piernas, así que confío en conservar la forma y continuar en la pelea con ellos a lo largo de estas dos últimas semanas.

¿Y anímico?

Enfadado, con ánimo de revancha después del 1:40 perdido en los abanicos. Nos afectaron un cúmulo de desgraciados factores, no lo merecíamos. Aún falta mucho partido. Las fuerzas siguen intactas. Lo demostré en la contrarreloj por equipos junto al resto de mis compañeros (el Groupama realizó un training camp específico de tres días, y luego sólo cedieron doce segundos ante el Ineos de Thomas y Bernal), y cuando respondí al acelerón de un ciclista tan explosivo como Alaphilippe camino de Saint-Étienne. Prometo atacar, no existe alternativa para remontar.

(Aficionado del PSG, Thibaut Pinot suele emplear en su lenguaje ejemplos y metáforas del fútbol. De momento marcha a 2:33 de Alaphilippe y a 1:21 de Thomas en la general. "Unas diferencias manejables para las jornadas pirenaicas y alpinas", insiste con optimismo).

En La Planche des Belles Filles únicamente perdió dos segundos frente a Geraint Thomas. ¿Un buen indicador para la alta montaña?

Sí, aunque tampoco supone un indicativo veraz sobre la condición de los rivales. La considero más una serie al máximo de un kilómetro que una ascensión como las que afrontaremos en los Pirineos y en los Alpes. En una temporada subiré La Planche des Belles Filles diez veces o más como entrenamiento, por su cercanía a mi casa. Responder a la presión y exigencia de los fans de mi tierra con una buena actuación me llenó de orgullo.

(Pinot, de 29 años, nació en Lure, Alto Saona. Desde 2010, curso en el que se convirtió en profesional, pertenece a la estructura del FDJ. Posee triunfos en las tres grandes y un podio, tercero del Tour de 2014. En 2018 conquistó un monumento, Lombardía, y la Milán-Turín, una clásica de caché).

¿Le preocupa la contrarreloj de Pau?

No tengo miedo. Aunque sé que no es mi especialidad, me proclamé campeón de Francia en 2016. Intento trabajar en la cabra. Aunque no voy a ganar tiempo sobre Thomas, no deseo cederlo.

¿Cómo le gusta competir?

En este Tour me encuentro bastante liberado. Quizá por la experiencia acumulada y por saber distinguir entre las cosas importantes. Quiero correr por placer. Atacar, ese es el ciclismo que me encanta. Si rindo bien y me siento con alegría, puedo lograr un buen resultado y terminar lo más cerca posible del cajón de París.

En Francia le señalan para suceder a Bernard Hinault como vencedor del Tour.

Se trata de otra manera de meter presión. Mis compatriotas piden un nuevo Hinault desde 1985. Pero no compito para convertirme en el próximo francés que se lleva el Tour, sino por todo mi equipo, por mi familia y por mí mismo, por lo que cuesta llegar a lo más alto.